16 de octubre: Día Mundial de la Alimentación

  • Los especialistas subrayan la importancia de fortalecer el trabajo para un mejor acceso a la nutrición adecuada para todas las personas.
  • Destacan que es clave el abordaje intersectorial.

Desde 1979, cada 16 de octubre se celebra el Día Mundial de la Alimentación, una oportunidad para hablar sobre el derecho de todas las personas a acceder a alimentos nutritivos. El lema elegido para este año es “Nuestras acciones son nuestro futuro”, que vincula la seguridad alimentaria a la necesidad de trabajar por una mejor producción y un mejor medio ambiente.

En adhesión a esta fecha, desde la Mesa intersectorial de prevención del sobrepeso y la obesidad, coordinada por la Dirección de Integración Sanitaria del Ministerio de Salud brindan información y recomendaciones.

Viviana Salde, referente de esta Mesa, indica que “en la adecuada alimentación de la comunidad intervienen diversos condicionantes de índole social, cultural, económica, y la información disponible también”. Al respecto, menciona que en Argentina al igual que otros países, se vienen dando cambios en los patrones alimentarios en los últimos años, caracterizados por una disminución en el consumo de alimentos frescos y el aumento de la oferta e ingesta de productos ultraprocesados, que aportan baja densidad de nutrientes y alto contenido de aditivos, azúcares, grasas y sal, generando distintos problemas de salud.

En este sentido, cabe recordar que las enfermedades cardio y cerebrovasculares, el cáncer, la diabetes y las enfermedades respiratorias forman parte de las Enfermedades Crónicas No Transmisibles (ECNT), y comparten los mismos factores de riesgo: consumo de tabaco y la exposición al humo de tabaco ajeno, la alimentación inadecuada, la inactividad física y el uso nocivo de alcohol.

De acuerdo a la última Encuesta Nacional de Factores de Riesgo, las ECNT afectan sobre todo a los sectores más vulnerados social y económicamente. En nuestro país estas enfermedades son responsables del 73,4% de las muertes, del 52 por ciento de los años de vida perdidos por muerte prematura, y del 76% de los años de vida ajustados por discapacidad.

Un dato que surge de la Encuesta Nacional es que el 46,6% de la población adulta en Argentina tiene hipertensión- HTA-, que es determinante en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares. En relación a ello, si bien no es el único factor, el elevado consumo de sodio aumenta las posibilidades de presentar HTA, y en el país se mantiene el consumo diario de sal de 11 gramos, mientras que la indicación de la OMS es no superar los 5 gramos en el día.

Al respecto, Salde expresó que es clave reducir el uso diario de sal, que, de acuerdo a los últimos datos a nivel nacional, el 16,4% de las personas sala las comidas antes de ingerirlas y el 68,9 por ciento agrega sal a los alimentos durante su cocción. Vinculado a ello, la especialista recordó que dos tercios del consumo de sodio provienen de los productos procesados o envasados, por lo cual es clave el trabajo con el sector comercial e industrial también”.

De acuerdo a las estadísticas, al excesivo consumo de sodio se suma una baja incorporación de frutas o verduras, el promedio diario nacional de porciones por persona es de 2, mientras que la indicación son 5 raciones al día.

Acciones en marcha y recomendaciones

Las principales líneas de acción para abordar la problemática están vinculadas a hacer más accesibles las opciones para una adecuada nutrición, lo que implica un abordaje multidimensional, por ello, la Mesa Intersectorial para la prevención del sobrepeso y obesidad reúne a distintos ministerios provinciales (Salud, Desarrollo Social, Industria, comercio y minería, Educación y Justicia) Ceprocor, la Dirección de Capital Humano y Paicor.

Desde allí, entre otras actividades, se trabaja en la promoción de entornos saludables, en escuelas, a través de la incorporación de quioscos y recreos saludables y activos, y también en espacios laborales, lo que incluye bebederos con agua segura, alimentación saludable, pausa activa, ambiente libre de humo, y espacios amigos de la lactancia.

Además, brindan capacitaciones a equipos de salud y en escuelas. Durante este año se llevaron a cabo instancias de formación sobre lactancia materna y obesidad infantil, a equipos de salud del primer y segundo nivel de atención y se prevén nuevos encuentros durante noviembre.  

En tanto para mejorar la alimentación, el equipo de especialistas recomienda a toda la comunidad:

Incorporar más frutas, verduras y productos frescos en las comidas, con preferencia por los de estación.

– Para los y las bebés, el mejor alimento es la leche materna, que se recomienda de manera exclusiva hasta los seis meses, lo que brindará protección para distintos problemas de salud durante todo el curso de vida.

– Estimular el consumo de legumbres y cereales integrales, aportan nutrientes indispensables, se complementan con otros alimentos, tienen alto valor de saciedad y resultan más económicos.   

Planificar un menú semanal, ayuda a organizar la compra, cocinar cada día platos equilibrados, variados que contengan nutrientes esenciales. 

Mantener el cuerpo activo y en movimiento, recordando que cualquier momento y lugar son buenos para hacer ejercicio, en la actividad cotidiana sumar pasos.

– Consumir agua segura a lo largo de todo el día.

Limitar el consumo de azúcar y sal

Evitar comidas chatarras, dulces procesados, preparaciones precocidas listas para su consumo, bebidas azucaradas y/o alcohólicas.