Biofarma
La empresa Biofarma fue una de las primeras en conectarse al gas natural, en los primeros meses de 2019. Esta agroindustria de la ciudad de Río Cuarto con 150 empleados posee dos plantas ubicadas en el Parque Industrial “Arturo Frondizzi”. Allí produce alimento balanceado para animales de granja: para cerdos y aves en una; para rumiantes en la otra.
De acuerdo con Raúl Bensi, jefe del departamento de Ingeniería de Biofarma, “el gas resultó una experiencia positiva, tenemos gas en las dos plantas ahora”.
En este sentido, enumeró los beneficios: “El suministro es continuo, tenemos gas siempre y ya no dependemos de tanques y del transporte que lo provee; los costos son menores y ahorramos 40 por ciento al menos; la calidad del gas es muy buena, los equipos y máquinas trabajan mejor, lo cual genera más comodidad”.
Bensi también comentó: “Río Cuarto ahora no tiene más problemas de gas; antes no había suficiente cantidad en la cañería de la ciudad para abastecer a la planta, pero con la red nueva mejoró”. Y ponderó que la gestión del trámite para acceder al gas industrial “fue excelente” por parte de la Provincia.
Olega
La empresa Olega también está entre las primeras que se sumaron al programa “Conectar Gas Industria”. Dedicada al acopio y procesamiento de maní confitería, sus dos plantas de Villa Reducción y Charras (departamento Juárez Celman) —con 130 y 120 empleados respectivamente—, se conectaron al gas natural el 5 de abril de 2019.
Nicolás Cantoro, gerente de operaciones de Olega, expresó que el principal beneficio fue el económico, al disminuir los costos productivos. “El costo del combustible se redujo a menos de la mitad; usábamos gas licuado de petróleo (GLP) y con el gas natural ahorramos más del 50 por ciento de lo que gastábamos en las cosechas de maní anteriores; nuestra empresa es la principal consumidora del gasoducto manicero”, precisó.
Otro aprovechamiento del gas natural, según Cantoro, es la seguridad que brinda. “Es más seguro para operar, más limpio e implica menor mantenimiento de las instalaciones”, comentó.
También remarcó que la logística del transporte de zeppelines con GLP era compleja. “Teníamos un impacto productivo al utilizar este combustible líquido porque se solía congelar en épocas de frío; en cambio con el gas natural se facilitó el proceso productivo enormemente y esto motiva a invertir en nuevos procesos”, indicó.
De hecho, Cantoro afirmó que al adherir al gas natural la empresa se comprometió a efectuar más inversiones. Anticipó que prontamente la empresa inaugurará una nueva línea de maní blancheado en Villa Reducción que dará trabajo a entre 15 y 20 nuevos empleados de la localidad y zona, con una inversión de tres millones de dólares.
“Hay muchas razones para conectarse al gas natural: es más limpio, más seguro y más económico; y la amortización es más rápida”, resaltó. “A nivel infraestructura, la llegada del gas debe haber sido lo más importante que recibió la empresa en los últimos 20 años”, agregó después.
Estación de GNC
La estación de GNC Osvaldo Fantini y Cía se acopló al gas natural a fines de febrero de 2020. Esta PyME de La Puerta (departamento Río Primero) sólo comercializaba combustibles líquidos, pero desde aquel mes también vende el producto, luego de efectuar la inversión necesaria para adherir al programa provincial.
Juan Pablo Fantini, presidente de la empresa, destacó: “Con el gas natural crecimos en volumen de ventas, incorporamos cinco empleados para ahora llegar a tener 16 y ampliamos el negocio”.
Según Fantini, el gas natural movilizó la cadena productiva en la zona. “Potenció otros rubros y genera muchos negocios directos e indirectos, al ser un combustible económico para fleteros, viajantes, talleres mecánicos y vendedores de equipos de GNC para autos”, sentenció.
“El gas trajo soluciones; aumentó la facturación respecto a años anteriores y estos ingresos adicionales fueron un salvavidas para atravesar este tiempo de pandemia”, confió luego.
Fantini adelantó que a fines de mayo la compañía abrirá otra estación de GNC en Balnearia. “Sumaremos cuatro nuevos puestos de trabajo y, luego, dos más”, aseguró. Y dijo que a fines de 2021 se habilitaría la tercera estación de la firma en Santa Rosa de Río Primero, para lo cual en los próximos meses empezarán la obra.
Posada Alma del Arroyo
La posada “Alma del Arroyo” se conectó al gas natural en junio de 2019. Hasta entonces este hotel de Villa General Belgrano (departamento Calamuchita) utilizaba garrafas y dependía del transporte que las proveía.
El dueño, Pablo Decaria, dijo que el acceso al gas natural representó un ahorro en los costos de “entre 40 y 45 por ciento”.
“Además del increíble ahorro que tuvimos, el gas natural implica más facilidad para trabajar, siempre funciona, es de calidad, llega con buena presión y hace que las calderas operen bien; eso da tranquilidad”, resaltó
BioNutrir
La empresa cordobesa BioNutrir, con sede en la localidad de Ordóñez, departamento Unión, nació en 2004 de la mano del veterinario Leandro Parissio.
Surge con la intención de producir alimentos para la nutrición animal accesibles para el productor. Hoy, también incorporó alimentos para consumo humano, en base a la proteína de la soja texturizada.
Además, elabora un conjunto de productos capaces de adaptarse a múltiples especies productivas: bovinos (para obtención de leche y carne), cerdos, ovinos, equinos y aves.
En 2009, decidió trasladar la sede a una nave del Parque Industrial de Ordóñez. Y en julio de 2020 se conectó por primera vez a la red de gas natural. Es la única empresa que adoptó este servicio hasta el momento dentro del predio.
Con una inversión superior a los 80 mil dólares, Parissio explica que decidió realizar la conexión desde el ingreso del pueblo hasta el Parque por varios motivos: “El gas natural me garantiza una calidad constante, cosa que no me ocurría con el gas envasado. Este tiene muchos problemas en el proceso, con los quemadores. El propio estacionamiento del gas hace que se deteriore”.
En relación con los costos de producción, el empresario subraya que los valores disminuyeron “drásticamente”: se evidencia un ahorro del 70 por ciento. Pasó de pagar más de un millón de pesos en julio de 2020 como última compra de gas envasado a abonar una factura de gas natural de 240 mil pesos en el último mes. Estima recuperar la inversión en un año y medio.
“El ahorro se destina a otras inversiones, por ejemplo a invertir en tecnología de proceso. El dinero se reinvierte. Incorporé tres personas en esa nueva línea y dos asistentes en calidad. Son en total cinco nuevos puestos de trabajo en menos de un año”, aclara.
Sumado a esto, Parissio pudo concretar la construcción de un nuevo horno con lo que antes se destinaba al gasto energético. “La plata va siempre a inversión”, remarca.
En BioNutrir trabajan 36 personas de forma directa y otras 15 de manera indirecta. La mayoría ordeñenses, aunque también de pueblos cercanos, como Idiazábal. Por otra parte, cuentan con una empresa satélite de transporte, distribución y logística.
