Bustos abrió el camino de la educación como sistema del Estado

  • El historiador Luis Felipe Moyano aseguró que fue un precursor en procurar garantías de financiación para la enseñanza.
  • Creó la Junta Protectora de Escuelas que ayudó a establecer un sistema educativo integral.

Militar, estadista y estratega, el Primer Gobernador Constitucional de la Provincia de Córdoba también consiguió destacarse por su visión abarcadora que lo llevó a asignarle un rol primordial a la educación, a la que consiguió incluir entre las obligaciones del Estado.

El licenciado en Historia Luis Felipe Moyano recordó dos de las medidas vinculadas a esa temática que caracterizaron los nueve años de la gobernación de Juan Bautista Bustos.

“En 1822 crea  la Junta Protectora de Escuelas y en 1823 introdujo la reforma de la Universidad Nacional de Cordoba, en momentos es que es provincializada, cuando las provincias reasumen su soberanía ante la caída del Directorio después de Cepeda”, dijo.

Para el historiador, esa institución, la Junta Protectora de Escuelas “establece un sistema educativo integral y define la educación primaria con los caracteres que va a asumir esa época: Una concepción de concentrar en el Estado provincial la voluntad de afirmar el federalismo y una vinculación con la participación vecinal”.

Para darle contexto al tipo de organización imperante en ese momento de la historia nacional, Moyano  explicó que “en esa época la educación estaba en manos del Cabildo”.

La Junta tiene una composición que integra “al alcalde de primer voto, al rector de la universidad, a un síndico procurador del Cabildo y a un consiliario más antiguo, y es esta conformación la que da apertura hacia una definición de gobierno educativo que le da carácter sistemático”.

La otra faceta clave es que dispone el financiamiento de la educación, a la que por primera vez se le asignan fondos. Precisó Moyano que “la Junta de Propios y Arbitrios  es la que va a determinar un impuesto que se hará sobre el giro de la hacienda que se consuma en el faenado diario de la ciudad y una suma  sobre las herencias transversales que es  destinada al financiamiento de la universidad”.

A juicio del historiador, esas dos disposiciones tienen un carácter precursor. “Si uno repasa las luchas docentes de este siglo y el anterior, una de las banderas de los gremios es que se asigne un fondo específico para la educación que, además, no pueda ser empleado para otros fines”.

Y subrayó Moyano que “es justamente este carácter sistémico que le otorga a la educación su  gran contribución.  Y, respecto a los estudios concretos, Bustos continuó con una tradición donde tenía importancia la religión pero con el sesgo realista liberal borbónico que heredaron nuestros caudillos provinciales más lúcidos”.