Síndrome urémico hemolítico: la prevención pasa por nuestras manos

El Síndrome Urémico Hemolítico (SUH) es una enfermedad causada por un grupo de bacterias (escherichia coli), que afecta principalmente a niños y niñas, pero también puede presentarse en adultos mayores y personas que tienen bajas las defensas debido a otras enfermedades. En algunos casos, puede dejar secuelas permanentes o incluso provocar la muerte.

En toda la provincia de Córdoba, durante el 2016, hubo 51 casos de SUH, esto es, 12 casos más que en el 2015. Pese a este aumento, no se produjeron fallecimientos por esta causa. Pero en el 78 por ciento de los casos (40) se necesitó tratamiento invasivo, es decir, transfusión y/o diálisis.

En relación con la distribución de casos según grupo de edad, el mayor porcentaje correspondió al grupo de 1 a 2 años, con 27 casos (53 por ciento). En cuanto al lugar de residencia, el 41 por ciento (21) reside en la ciudad de Córdoba. En localidades del interior hubo 28 casos (55 por ciento), distribuidos en 22 localidades. Además, hubo dos casos atendidos (4 por ciento) correspondientes a otras provincias (Santa Fe y San Luis).

Prevención y síntomas de alerta

La enfermedad comienza con diarrea, con o sin sangre, dolor abdominal y vómitos. Otros síntomas de alarma son palidez, disminución en la eliminación de orina, decaimiento o irritabilidad, y en los bebés y niños pequeños, el rechazo al alimento. Ante cualquiera de estos signos, es fundamental consultar con un médico.

En la prevención del SUH es muy importante el acceso a agua segura, que debe usarse siempre para consumo, para higiene y para preparar los alimentos. Ante cualquier duda, hay que agregar dos gotas de lavandina por cada litro de agua, o hervirla durante tres minutos.

También juegan un papel clave el lavado de manos y el cuidado al manipular, cocinar y conservar los alimentos. En el hogar, y también al salir a comer a bares y restaurantes, hay muchas cosas que se pueden hacer para evitar esta infección:

Lavado de manos

La correcta higiene de las manos es clave. Lavarse siempre las manos:

–Antes de comer, cocinar o manipular alimentos.

–Después de tocar alimentos crudos.

–Después de ir al baño o cambiar pañales.

–Después de acariciar o jugar con mascotas.

Para el lavado de manos, usar agua segura y jabón, frotar palmas, dorso, espacio entre los dedos y muñecas durante 20 segundos, y secarse con una toalla limpia o descartable.

Es importante enseñarles a los niños y niñas cómo lavarse correctamente las manos y por qué hacerlo.

Al cocinar o manipular alimentos

Es fundamental ser muy cuidadosos a la hora de manipular los alimentos, y evitar siempre el contacto entre alimentos crudos y cocidos, incluso al guardarlos en la heladera.

–Cocinar la carne completamente, en especial la molida. No debe estar jugosa, ni rosada en el centro. Exigir lo mismo al comer fuera de casa.

–Evitar cocinar la carne cuando está congelada.

–Al preparar la comida, evitar que los utensilios usados para las carnes crudas tomen contacto con otros alimentos.

-Lavar bien las frutas y verduras -aún las que vienen en bandejas- con agua potable y luego dejarlas durante cinco minutos en agua con vinagre o con una gotita de lavandina.

–Lavar también los huevos antes de guardarlos en la heladera.

–Evitar manipular y/o preparar alimentos si se tienen síntomas como diarrea, vómitos o dolor abdominal.

Además, resulta fundamental mantener la cadena de frío de los alimentos. Por eso:

–Cuando se va de compras, buscar los alimentos refrigerados (lácteos o productos congelados) al final y guardarlos en la heladera o freezer apenas se regrese al hogar.

–No dejar enfriar los alimentos cocidos a temperatura ambiente, colocarlos en la heladera lo antes posible.

–Tampoco descongelarlos sobre la mesada de la cocina; dejarlos en una bandeja dentro de la heladera o usar el microondas.

–No volver a congelar un alimento que ya fue descongelado.

–Una vez que se cocinó el alimento, consumirlo pronto.

Higiene en la cocina

Mantener la limpieza en la cocina y en la heladera también es muy importante a la hora de prevenir el SUH.

–Lavar con agua y detergente todos los utensilios utilizados.

–Limpiar la mesada usando agua con lavandina.

–Lavar o herví frecuentemente esponjas, trapos y rejillas.

–Higienizar y descongelar tu heladera y/o freezer periódicamente.

Alimentos confiables

Al comprar o elegir los alimentos, tener en cuenta los siguientes consejos:

-Exigir siempre que la carne sea molida en el momento de la compra y a la vista. Consumirla inmediatamente, porque este producto se alterará más rápidamente que una pieza de carne entera.

–Consumir solamente lácteos y jugos pasteurizados.

–Controlar las fechas de vencimiento de todos los productos.

–No comprar alimentos sin fecha, marca o números de registro.

–No permitir que expendan el pan o cualquier producto a granel sin guantes, o luego de haber manipulado dinero.

–No comprar comidas que se exhiban a temperatura ambiente.

–No consumir huevos que tengan su cáscara rota.