Frío, una técnica que ya salva vidas en Córdoba

A las 17 horas del domingo se produjo en la Maternidad provincial el nacimiento de un niño con desprendimiento de placenta, evento agudo que ocasionó una falta de oxígeno en todo su cuerpo. Luego que los neonatólogos, capacitados en cómo recibir a este tipo de paciente, lo prepararon, se procedió a su traslado. El niño llegó al Misericordia, donde se le suministró el tratamiento llamado Enfriamiento Cerebral Selectivo. Actualmente permanece en el nosocomio y su evolución es buena.

El doctor Luis Ahumada, jefe del Servicio de Neonatología del mencionado hospital, explica: “Es un tratamiento aplicable a recién nacidos que han sufrido algún tipo de asfixia en el período neonatal. De alguna forma no les ha llegado una buena cantidad de sangre al cuerpo y de oxígeno a través de la placenta. Estos niños nacen sin respirar y necesitan ser reanimados para poder sobrevivir”.

Ahumada, que integra el equipo de protección neurológica Neuroprotecba, dice que el tratamiento consiste en enfriar la cabeza del paciente para evitar el daño que produce el llamado oxígeno secundario. “Esto significa que, ante una deprivación de oxígeno, hay un período en el que se liberan sustancias que terminan dañando más el cerebro de lo que lo dañó el problema inicial.

“Es entonces cuando, aplicando una hipotermia entre leve y moderada, es decir disminuyendo la temperatura de la cabeza, ese daño secundario se reduce, con un descenso de entre un 30 y un 50 por ciento de las posibilidades de morir o quedar con una discapacidad permanente en el futuro”, explica Ahumada.

El tratamiento se está practicando actualmente en el Hospital Fernández de Buenos Aires y en otros nosocomios de la capital nacional. El Hospital Misericordia de Córdoba es el único centro de salud del interior del país donde se aplica, incluyendo al sector privado. El de ayer fue el primer caso en que se utilizó activamente en Córdoba.

El enfriamiento cerebral se realiza mediante un aparato semejante a un casco que enfría selectivamente la cabeza del paciente (hay otros dispositivos que enfrían todo el cuerpo), que en Estados Unidos recibe el nombre de cool cap. Este equipamiento es el único aprobado por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) de Argentina y la Food and Drug Administration (FDA) norteamericana.

El equipo incluye un monitoreo del frío que se está suministrando al paciente. Un segundo aparato mide un electroencefalograma permanente.

El bebé, que ayer recibió por primera vez el tratamiento presentó un episodio convulsivo y alguna restricción urinaria. “Pero se pudo mantener la temperatura que se había fijado desde anoche hasta hoy, y lo estamos controlando”, finalizó Ahumada.