Feliz recuperación de beba que tomó veneno para cucarachas

Después de quedar internada durante 14 días en el Hospital de Niños de Córdoba, Maité, una nena que ingirió veneno para cucarachas, fue dada de alta y está nuevamente en la ciudad de Termas de Río Hondo, provincia de Santiago del Estero, donde vive con su familia.

El accidente doméstico ocurrió el pasado 23 de marzo en un descuido de los papás, motivando que Maité fuera llevada al hospital zonal. La chiquita presentaba vómitos, debilidad muscular, salivación abundante, temblores y sus pupilas estaban empequeñecidas.

La complejidad del cuadro motivó que el médico tratante se comunicara con la doctora Nilda Gait, jefa de Toxicología del Hospital de Niños de nuestra provincia, quien explicó que pasadas 48 horas el antídoto ya no puede emplearse y sugirió la conveniencia de derivar a la pequeña a este hospital de alta complejidad.

Maité fue trasladada de forma inmediata a nuestra provincia y llegó al Hospital de Niños de Córdoba en estado grave. “El dosaje enzimático era bajísimo, casi incompatible con la vida”, según informó Gait. La paciente estuvo en terapia intensiva con respirador por seis días, atendida con el antídoto específico (atropina) en bomba de infusión.

El día 31 de marzo comenzaron a subir los valores enzimáticos. Maite presentaba tolerancia oral y otros indicios de mejora, pero también debilidad leve en miembros inferiores y tronco. Durante dos meses será sometida a controles neurológicos en conjunto con el servicio de Toxicología del Hospital de Niños, con el fin de pesquisar posibles complicaciones y seguir su desarrollo.

Finalmente, al cabo de dos semanas, Maité retornó a su hogar. La mamá de la nena resumió el momento que debió atravesar su familia y que llegó a este feliz desenlace.

“La felicidad me invade, volvemos a nuestro pago y con mi niña. No tengo palabras para expresar mi agradecimiento. Esta experiencia nos dejó muchas cosas, entre ellas, saber que aún queda gente buena. Nos volveremos a encontrar en cada control, hasta pronto”, expresó la mujer.

El valor de la prevención

Es necesario saber que la ingesta de estos plaguicidas (llamados organofosforados) produce una mortalidad del 30 por ciento. El diagnóstico y el tratamiento oportunos son invalorables a la hora de evitar secuelas.

Para tener siempre presente:

• No dejar nunca venenos al alcance de los niños.

• Mantener tapados y en lugar seguro los recipientes de basura.

• Guardar inmediatamente en lugar seguro los productos químicos luego de usarlos.

• No pulverizar plaguicidas domésticos sobre alimentos o cerca de los juguetes de los niños.

• No mezclar productos de limpieza o plaguicidas.

• No colocar estos tóxicos en envases de alimentos y bebidas.