- El Patronato del Liberado dictó un taller sobre armado de velas aromáticas para mujeres que se encuentran bajo su asistencia, con el propósito de generar posibilidades laborales.
- Capacitación en producción de velas y jabones, y herramientas comerciales, componen la propuesta que brinda a las mujeres una oportunidad para emprender.
- María Constanza y Agustina González de la línea “Grecia Home”, dieron la capacitación en armado de velas en base a cera de soja.
En el Centro Cultural Graciela Carena, un grupo de mujeres que se encuentran bajo la asistencia y control de la Dirección del Patronato del Liberado, se introdujeron en la producción y armado de velas de la mano de dos emprendedoras: Agustina y María Constanza González, titulares de la línea decorativa y aromática “Grecia Home”.
Este taller- encuentro constituyó el primero de una serie para mujeres que se encuentran en libertad condicional, asistida, o en prisión domiciliaria, con el fin de brindarles herramientas para su desarrollo personal e inserción laboral.
Durante la bienvenida al espacio de aprendizaje, la secretaria de Organización y Gestión Penitenciaria, Cecilia Lanzarotti, contó que la proyección del mismo fue motivo de gran entusiasmo. “Todos nosotros trabajamos para que hoy puedan tener este lugar, puedan emprender a hacer velas y la semana que viene jabones, y podamos generar antes de Navidad un espacio de comercialización”, indicó Lanzarotti. “Queremos darles una oportunidad para que salgan adelante”, dijo a las mujeres que se inscribieron al curso.
La próxima semana “Aromas en Libertad” continúa con dos talleres más sobre elaboración de jabones, y también con capacitación en Microemprendimientos a cargo de la Secretaría de Graduados de la Universidad Nacional de Córdoba, en virtud del convenio firmado entre la UNC y el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.
Con los delantales puestos
Un amplio espacio de trabajo aguardaba a las participantes con los elementos necesarios para poder realizar ellas mismas sus velas a medida que Agustina y Coty dieran las indicaciones y contaran cómo armar velas aromáticas en base a cera de soja. Cada puesto las esperaba con su cuaderno y birome para tomar notas, y sus delantales azules de Aromas en Libertad.
Las hermanas las alentaron. Dijeron que ellas comenzaron su emprendimiento a base de producción de velas. “Es un producto que se vende bien, es lo primero que sale, y requiere una mínima inversión, por eso creemos que les puede aportar mucho como salida laboral”, compartieron. “Con esto se arranca de a poco y de a poco se van viendo los frutos, hay que tener mucha paciencia, lo importante es seguir y seguir, y hacerlo con amor”, comentaron a las aprendices.
El armado artesanal de velas produjo un ambiente ameno y descontracturado. Entre aromas de limón, y vainilla, las chicas comenzaron a advertir que no solo las velas son bonitas, sino que también hacerlas era agradable.
“A las velas grandes hay que ponerles dos pabilos”, indicaba Coty, mientras aprendían a sujetar los pabilos a la base de los recipientes. Asimilar el punto de consistencia de la cera y cómo obtenerlo, la proporción de esencia para la elaboración de cada vela, los secretos para que la mecha quede en el centro, y todo lo que implica obtener una vela bonita, hasta los primeros canales de comercialización utilizados, todo fue pacientemente compartido por las profesoras, a medida que las mujeres iban experimentando.
“A mí me sirve de mucho y me despeja la cabeza”, comentó una. Otra agradeció el espacio: “creo que esto no va a ayudar a valorarnos y hacer las cosas un poquito mejor”, agregó. Y a medida que el entusiasmo aumentaba, comenzaban a proyectar su emprendimiento.
Acompañaron el encuentro taller, la directora general de Capacitación Profesional Penitenciaria, Sandra Chiavaro, el director de Políticas Penitenciarias, Pedro Yanzi Aspel, y la responsable del Patronato del Liberado, Patricia Corbalán.