Los museos hoy: un modelo para armar

Desde el miércoles 4 y hasta el viernes 6 se desarrollan en el museo Evita las II Jornadas de Reflexión y gestión de museos, que reúne a trabajadores y representantes de museos de todo el país, y público en general. Se trata de un espacio destinado a promover y reflexionar acerca del trabajo en los museos, a través de la ponencia de diferentes temáticas por abordadas por profesionales de museos de la Argentina.

El encargado de abrir las jornadas fue el director del Museo, Tomás Bondone, quie reflexionó acerca de la importancia del diálogo y el encuentro para mejorar el trabajo en los museos. El presidente de la Fundación Teoría y Práctica de las Artes (TyPA), Américo Castilla se refirió a las jornadas y a los desafíos que quedan por asumir.

¿Cuál es el objetivo de las jornadas?

Esto habla de la necesidad de encontrarse en un diálogo, porque en los que trabajamos en los museos no es que hayamos estudiado, aprendemos en la acción, entonces somos actores, y en algún momento hace falta dar un paso atrás y reflexionar sobre lo que estamos haciendo y lo que hicimos. Y estas son estas instancias de reflexión y acción. En estos casos se conoce lo que uno aprende a través de la acción. Y las consecuencias son importantes porque si la acción cumple con las consignas que se ha planteado, eso queda a la vista.

¿Cuáles son los cambios que se tienen que dar en ese diálogo?

Los museos precisan un cambio fuerte, radical. Nos hemos quedado atrás, el museo como construcción que define la identidad de una nación, los preceptos con los cuales en el siglo 19 se crearon los museos, quedaron atrás. Hoy en día, si uno mira a los museos que son más eficaces en cuanto a generar políticas con el público son aquellos que renovaron sus métodos. No es que ponen sus cuadros y esperan que venga la gente. Este método no resulta, uno puede poner cuadros magníficos, pero uno tiene que salir a generar situaciones y crear experiencias. No esperar que ese contacto se realice solo con la mirada del eventual espectador que accede al museo.

¿Cuáles son los nuevos desafíos de los museos con el público y los artistas?

En la actualidad el museo propone un espacio para que se genere una experiencia, y esta experiencia tiene que ser satisfactoria para ambos. Para el que la realiza y para el que la recibe. Para esto hay métodos, hay formas. Siempre que se hace una crítica al pasado puede suceder que en el entusiasmo de contradecirlo no quede nada, no quede museo. En algunos casos está pasando. No es que haya un modelo, que hay que observar en todos los casos, hay que tener que consciencia y conocimiento en lo que se hace, y ver de acuerdo al contexto de cado uno, aprovechar las experiencias para crear las propias. Hay que hacerse las preguntas adecuadas y pasarla bien. El museo no tiene por qué ser solemne. Puede ser divertido, procaz. Puede tratar temas complejos, el espectador tiene que saber que está viviendo la narración que va a confrontar, con problemas actuales: salud, sexo higiene, alimentación. Hay que promover la emoción. Si la experiencia golpea en el pecho, se abren los poros para comprender lo que se está diciendo.

Américo Castilla cierra las jornadas el viernes a las 18 con la charla El Malestar en los Museos. Se invita a los profesionales de museos y centros culturales, artistas, estudiantes y público general a participar de las charlas abiertas para aportar al debate en pos de la construcción conjunta de la renovación de los museos del país. Las charlas se realizarán en el auditorio del museo, de 17 a 19.30, con entrada libre.