Durante los últimos días, en el marco de la Semana Mundial de la concientización sobre la Sal, el ministerio de Salud de la Provincia de Córdoba se encuentra desarrollando acciones y convenios de cooperación que promueven en la comunidad la reducción del consumo de sodio para disminuir los factores de riesgo de enfermedades renales y coronarias en cada rincón de la provincia.
A través de la Dirección de Promoción y Protección de Enfermedades Crónicas No Transmisibles, la cartera provincial adhiere a la propuesta recomendando reducir el consumo diario de sal, consumir menos alimentos procesados y más alimentos naturales, evitar agregar sal a las comidas y buscar alternativas para sazonar las preparaciones tanto en casa como las que se elaboran para consumo en restaurantes y servicios de comidas fuera del hogar. En la alimentación actual, se ha aumentado el consumo de alimentos procesados, que contienen cantidades excesivas de sodio.
La Semana Mundial por la Sensibilización Sobre la Sal fue instituida en 2005 por la organización internacional World Action on Salt and Health (WASH), con el objetivo de concientizar a la sociedad en la reducción de su consumo como aporte para la mejora de la salud de la población mundial. Este 2015, el lema es “La sal y los niños”.
En Argentina, el consumo promedio es el doble de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), de cinco gramos por día. Se considera que un consumo mayor aumenta la prevalencia general de la hipertensión, principal factor de riesgo para enfermedades cardiacas, accidentes cerebrovasculares e insuficiencia renal entre otras enfermedades.
Recomendaciones
- No salar los alimentos mientras se cocina.
- En la mesa, reemplazar el salero por el pimentero.
- Utilizar hierbas aromáticas para resaltar el sabor de los alimentos.
- Sellar las carnes para retener su jugo y sabor.
- Aportar sabor mediante jugo de limón, vinagre, aceto balsámico, cebolla y ajo. •Preferir frutas y verduras como colaciones en vez de productos de copetín y galletitas. •Leer las etiquetas para saber cuánto sodio contienen. Hay productos “reducidos en sodio”, “bajos en sodio” o “sin sodio agregado”.
- Recordar que el sodio puede estar en las etiquetas como ciclamato de sodio, glutamato de sodio, bicarbonato de sodio y citrato de sodio.
- Reemplazar alimentos enlatados por naturales (por ejemplo, tomate en lata por tomate fresco).
- Moderar el consumo de enlatados, fiambres, caldos concentrados, aderezos, embutidos, productos de copetín, quesos duros, y preferir alimentos naturales Utilizar hierbas aromáticas y especias como pimienta en vez de sal. Evitar salar la primera comida de los bebés.
Algunas alternativas naturales
- Reemplazar la sal en las comidas con:
- Orégano en pescados, carne asada, pollo, hortalizas, legumbres, rellenos de pastas, saldas y pizzas.
- Salvia para sazonar pescados, cordero, cerdo, lácteos, legumbres.
- Laurel en estofados, salsas, adobos, vinagretas, escabeches.
- Azafrán en hortalizas, arroz, cazuelas, pollo, paellas.
- Clavo de olor en carnes rojas, pastelería, frutas, compotas.
- Perejil, que combina bien con ajo y aceite de oliva
- Albahaca en sopas, pastas, verduras, ensaladas.
- Romero en cordero, lechón, pollo, legumbres, masas para panes.
- Tomillo en carnes y legumbres.
- Estragón en cremas, jamón o carnes y ensaladas verdes.
- Jengibre en pescados y arroz.
- Ají molido en carnes, hortalizas, rellenos y guisos.
- Pimentón en salsas, guisos y carnes.
- Vainilla en pastelería, bebidas, repostería.