La segunda jornada de Reflexión y Gestión de Museos continuó brindando experiencias museísticas procedentes de distintas partes del país, lo que está enriqueciendo sustancialmente este encuentro que culmina hoy, en el Museo Superior de Bellas Artes Evita-Palacio Ferreya de la ciudad de Córdoba. En los encuentros se transmitieron experiencias de museos de ciencias, de arte y de usos y costumbres urbanos.
Gisela Bahler, miembro del Museo Provincial Antonio Serrano, institución dedicada a las ciencias con sede en Entre Ríos, abrió la jornada con una exposición sobre «Estrategias y experiencias para revitalizar Museos».
En principio sostuvo que el museo del cual forma parte “tiene el compromiso irrenunciable de la socialización del conocimiento, mediante políticas de comunicación y acciones concretas destinadas a atender una diversidad de intereses que conforman eso que se llama el Público”. “Un museo, enfatizó, es una institución que favorece el desarrollo del individuo y de su comunidad”.
Luego de trazar la misión y la visión, en un ámbito participativo entre los miembros de la institución, el Museo Antonio Serrano puso en práctica acciones que fueron ganado terreno, e incluso continuaron aún en los meses de vacaciones. Por ejemplo, en 2004 el museo tenía 3 talleres didácticos, actualmente ofrece 16, algunos de ellos destinados a personas con capacidades diferentes.
En cuanto a la interacción con la niñez, Gisela Bahler destacó la utilidad de la práctica lúdica, como manera de atraer la atención de los más chicos por las ciencias y la investigación. En ese sentido, puso como ejemplo diferentes experiencias que se han llevado a cabo, como “Exploradores en el Museo” y “Yo pasé una noche en el Museo”.
A continuación, Claudia Ferreto expuso sobre el Museo de Arte Eduardo Minnicelli, primer y único museo de arte de la provincia de Santa Cruz, ubicado en la ciudad de Río Gallegos.
Ferreto puso el acento en una serie de iniciativas para extender el museo a la comunidad. En ese sentido, compartió una notable cantidad de proyectos, que están siendo llevados a cabo con muy buena aceptación.
Así nació un índice verdaderamente ocurrente y efectivo, que dio como resultado diversos proyectos: “El museo es taller”; “El museo va a la escuela”; “Estudio fotográfico”; “El museo es un espacio para jugar”; “El museo sale de viaje”; y “El museo en la web”. El resultado de esas iniciativas, sostenidas a lo largo del tiempo, es que “la comunidad de Río Gallegos se siente dueña de su museo, un museo que está vivo”.
Para finalizar, Ricardo Pinar, director del Museo de la Ciudad de Buenos Aires, un complejo integrado por edificios pertenecientes a distintas épocas, situados en el barrio de Monserrat, relató cómo se fueron restaurando algunas de las antiguas casonas restauradas del complejo cultural, desde la perspectiva edilicia y funcional. Seguidamente, Pinar habló de la puesta en valor de los edificios, mostró cómo se acondicionaron los espacios expositivos, de gestión y depósitos. Según Pinar, el museo debe saber contar qué se está mostrando para despertar el interés del visitante.