Para acelerar tiempos, las causas Civiles y Comerciales serán orales

En el marco de los 100 años que hoy cumple el Recinto de Sesiones, la Legislatura de Córdoba convirtió en ley el proyecto que introduce la Oralidad en las causas que se tramitan en los fueros Civiles y Comerciales. La iniciativa, presentada por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, fue ampliamente debatida en el recinto hasta lograr el consenso de los parlamentarios, que la votaron por unanimidad.

Hasta ahora los procesos judiciales de este tipo son escritos, es decir, que los jueces no toman contacto con las partes si no que se tramita de forma burocrática a través de documentos que forman grandes expedientes y demoran la resolución original de conflicto.


“Estamos cambiando un paradigma cultural. Hoy, las causas civiles acumulan miles de papeles y cuerpos de expedientes, pero eso queda atrás con la Oralidad. La Oralidad garantiza la inmediatez, la participación del juez en interacción con las partes y las pruebas acorta los plazos”, explicó Luis Angulo, ministro de Justicia y Derechos Humanos.


La iniciativa forma parte del paquete de reformas judiciales que fueron enviadas por el Ejecutivo provincial, para agilizar y modernizar los procesos judiciales y acercar los juzgados a la ciudadanía. A mediados de mayo fue aprobada por todos los bloques el primero de estos proyectos: la mediación prejudicial será obligatoria en todas las causas Civiles y Comerciales.

Angulo señaló que con la Oralidad y la Mediación “queda atrás el paradigma de la confrontación. Nuestro nuevo paradigma es el del encuentro, la negociación y, sobre todo, reducir la papelización de los procesos para acortar los tiempos”, señaló.

La mayoría de las provincias ya están aplicando la oralidad, algunas de forma efectiva y otras en procesos de prueba piloto. Laura Echenique, secretaria de Justicia de la Provincia, explicó que esta nueva metodología mejorará la calidad de las decisiones jurisdiccionales ya que concentrará varios trámites procesales en dos audiencias.

En Córdoba comenzará a aplicarse en una primera instancia con una prueba piloto que incluirá sólo las demandas de daños y perjuicios por montos menores a 160 mil pesos. La etapa de prueba se realizará en 15 juzgados que se ofrecieron de manera voluntaria para implementarlo.

El diseño original del proyecto de ley estuvo a cargo del equipo del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos y, según sus autores, podría reducir los plazos de litigios de cuatro años a un año y medio. Hace un mes comenzó a discutirse en comisiones de la Unicameral donde recibió aportes de legisladores de varios bloques.

Procedimiento

Según el proyecto, las causas se estructurarán en dos audiencias: una preliminar y otra complementaria. “En este caso hay un juez presente, que tiene otro protagonismo al momento de recibir las pruebas y escuchar a las partes y peritos”, explicó Ignacio Villada, asesor del Ministerio de Justicia.

“Que el juez pueda escuchar las pruebas de boca de los involucrados, además de acelerar el proceso, hace que la Justicia sea más fidedigna, que no esté mediada por actas y escritos que a veces tergiversan o interpretan las declaraciones”. Por otro lado, en la audiencia, se resumen varios actos procesales, lo que hace más expeditivo el trámite.

Los principios básicos sobre los que se fundamenta la Oralidad son: la inmediatez, al conectar directamente al juez con las partes; la concentración de actos procesales en sólo dos audiencias; la celeridad, al garantizar plazos razonables y la transparencia y la confianza, al ser actos públicos realizados con la participación ciudadana.