Apoyo y contención también en verano

El abrazador calor de la tarde pasó desapercibido para más de 200 mujeres, quienes acompañadas por sus hijos, participaron en la jornada de despedida de la Escuela de Verano, que el Polo Integral de la Mujer puso en funcionamiento esta temporada como parte de las actividades de acompañamiento para víctimas que sufrieron violencia de género.

Las instalaciones del Centro de Desarrollo Deportivo ubicado en Villa Allende, que pertenece a la Agencia Córdoba Deportes, fueron el epicentro del último capítulo de un menú con propuestas para mujeres que están bajo el Programa de Violencia Familiar, que brinda el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, a través del Polo Integral de la Mujer. Las actividades arrancaron el pasado 7 de enero e incluyeron talleres con actividades recreativas, culturales y de formación laboral.

Luego del almuerzo, donde la secretaria de Lucha contra la Violencia a la Mujer y Trata de Personas Claudia Martínez destacó la participación de las mujeres en la continuidad de los procesos de contención y apoyo psicosocial que brinda el Polo, la pileta dio paso al esparcimiento con clases de zumba incluida. Cerrando la jornada, una gran mateada fue el epílogo de dos meses de aprendizajes, disfrute de paseos y esparcimientos, visitas a museos, idas al teatro y los abrazos fraternos de un grupo que convivió durante dos meses.

“Nos hemos sentido muy bien. Todo el personal del Polo contiene a las mujeres y esta es una nueva modalidad de aprovechar el verano y es otra oportunidad para sentirse bien. Hicimos cursos donde aprendimos cosas nuevas como maquillaje, totora y otros, que nos han servido mucho para salida laboral”, resume como nadie María José, quien además agrega: “Se las ve contentas y felices a las mujeres disfrutando de cosas que en otros momentos no han podido disfrutar”.

Matilde, otra víctima de violencia, pudo disfrutar de la Escuela de Verano en un año en el que espera comenzar el secundario luego de haber terminado en el Polo de la Mujer los talleres de peluquería, maquillaje y manicuría, que ahora le permiten llevar adelante un micro emprendimiento. “Está muy bueno porque es una muy buena experiencia. Te ayuda un montón a ir superando muchas cosas. Se forman grupos lindos y es un lugar de contención para todas”, afirma.

Entre el menú de actividades, concretados de lunes a jueves de 9 a 16 horas y que incluyeron desayuno, almuerzo y merienda, se realizaron talleres de manicuría express, maquillaje, totora, accesorios y bijouterie, decoupage, pintura de macetas y decoración de habitaciones de bebés. También se dictaron talleres de guitarra, de lectura y narración. Además se realizaron actividades recreativas como salidas grupales a museos y a espectáculos teatrales.