De vacaciones: haciendo campamento

Disfrutar del paisaje, desenchufarse del ritmo de la ciudad, respirar el aire de la montaña y estar en contacto con la naturaleza son algunas de las experiencias que resaltan quienes acampan en las sierras de Córdoba. Instalar la carpa para pasar un par de días a pleno no tiene muchos secretos, sólo hay que tomar ciertos recaudos para evitar contratiempos.

Algunas recomendaciones para llevar en la mochila.

Defensa Civil de la provincia aconseja armar la carpa en un lugar en lugar arbolado, que brindará sombra y protección en caso que se produzcan tormentas.

Elegí una parcela alejada del río y en zonas altas. Las crecidas pueden darse de manera imprevista, arrasando con lo que encuentran a su paso.

Armá la carpa sobre un terreno nivelado. Retirá piedras, ramas y otros objetos con anterioridad. Si hay vegetación cerca podemos formar una capa de hojas sobre el sitio dónde acamparemos. Tené en cuenta no estar en una zona donde el terreno forma un embudo o un pozo, ya que en caso de lluvia la carpa se puede inundar.

Donde pasan ríos y arroyos, observá con detenimiento la marca nivel de las crecidas, que normalmente deja resaca en árboles, piedras y alambrados. No pongás la carpa en esas zonas.

No cavar canales alrededor de la carpa ya que, además de no servir para escurrir el agua del todo,  al retirar la carpa queda el terreno poceado.

Con respecto a la orientación generalmente la cola de la carpa apuntando hacia donde vienen los vientos o posibles tormentas.

No instalés el campamento en lugares con probabilidad de derrumbes o desprendimientos de piedras o cascotes.

Está prohibido hacer fuego fuera de las zonas destinadas al uso de parrillas (camping, predios municipales, clubes, etcétera). Para la legislación cordobesa es un delito penado con prisión.

No olvidés llevar ropa adecuada. De noche baja sensiblemente la temperatura en las sierras: llevá abrigo.

No dejés basura, restos de comida y pozos en el suelo. La vida silvestre mantiene el equilibrio ecológico: adonde vayas preservá animales y plantas.