Re-implante de mano en el Hospital Tránsito Cáceres de Allende

El Hospital Tránsito Cáceres de Allende realizó exitosamente un re-implante completo de mano a un varón de 47 años que había ingresado con una lesión severa en su muñeca derecha, con fractura expuesta que comprometía los huesos radio y cúbito. Con esta intervención, el hospital consolida su perfil de centro de referencia en politrauma.

“Es la primera vez que realizamos un re-implante de mano en nuestra salud pública, en estado agudo. Hace cuatro años que venimos trabajando en el hospital para prepararnos para este tipo de situaciones, con un equipo multidisciplinario. Estamos conformando, con el Hospital municipal de Urgencias, un corredor sanitario en emergentología, para dar respuesta a toda la provincia”, expresó el director de la institución, Antonio Caravello.

Se trata del caso de un paciente que fue atendido inicialmente en el Hospital municipal de Arroyito, prácticamente con una amputación traumática de su mano, y desde allí fue trasladado -a través de la ágil gestión de Derivación de Pacientes- al centro ubicado en la capital. Luego de la valoración por guardia, es ingresado de forma urgente al quirófano, para la estabilización y reparación arterial. También se colocó en ese momento un tutor externo transitorio para el control del daño, inmovilizar la zona de la fractura y proteger la sutura arterial. Estos procedimientos estuvieron a cargo de los servicios de cirugía vascular periférica y de traumatología.

“En el resultado de este procedimiento ha sido muy importante la primera atención que recibió en Arroyito, y la efectiva derivación hacia un hospital que lo esperaba con todo el equipo preparado para su atención”, explicó Félix Revol, a cargo del servicio de traumatología y ortopedia del Hospital.

El 1 de noviembre, a 11 días de su ingreso al hospital, se realizó una nueva intervención, denominada osteosíntesis definitiva de radio y cúbito, a cargo del departamento de miembro superior del servicio de traumatología. Estabilizadas las estructuras óseas, se procede a reparar los 12 tendones flexores de muñeca y dedo y de los nervios mediano y cubital, que proporcionan movilidad y sensibilidad a la mano. Estos procedimientos implican técnicas de microcirugía que fueron llevadas a cabo por los profesionales de los servicios mencionados, en conjunto con los médicos residentes. Luego de más de ocho horas de cirugía, el paciente egresó con una férula dorsal con la muñeca en flexión.

Actualmente, a menos de 15 días de la segunda intervención, el paciente fue dado de alta este martes, evoluciona bien y ha iniciado ejercicios de rehabilitación con una terapista ocupacional del hospital, especializada en miembros superiores y siguiendo un protocolo que implica sesiones hospitalarias y mucha tarea y colaboración por parte del paciente en su hogar.

Caravello reconoció el trabajo de todo el hospital en este caso, que incluyó a los servicios de ortopedia y traumatología; guardia central; vascular periférico; anestesia; clínica; enfermería; instrumentadores quirúrgicos; terapia ocupacional, entre otros. También destacó al personal administrativo y a los profesionales de auditoría, que posibilitaron que se contara con todos los insumos necesarios en forma oportuna en una situación de urgencia.

Por su parte, Mateo Ghione, la persona intervenida, manifestó: “Me siento muy bien, ya puedo mover los dedos y estoy muy agradecido a toda la gente que trabaja acá: enfermeros, doctores, gente de limpieza, gente que se nota que ama mucho su trabajo”.