Actividades en la Semana de la Salud Renal

El segundo jueves de marzo de cada año se celebra el Día Mundial del Riñón, fecha propicia para sensibilizar acerca de la importancia del cuidado de la salud renal. El lema elegido a nivel internacional para 2016 es: ¡Enfermedad renal y niños, actúa pronto para prevenirla!

Por ello, desde el jueves 10 y hasta el miércoles 16 inclusive (en días hábiles), de 9 a 14 horas en la explanada del Cabildo de Córdoba, se llevará a cabo la “Semana de la Salud renal de los niños”. La actividad incluye controles gratuitos de prevención -peso, talla, índice de masa corporal y tensión arterial- por parte de profesionales del servicio de Nefrología del Hospital de Niños. Además, se brindará información y consejos a toda la familia.

Esta campaña es organizada por la Administración Provincial del Seguro de Salud (Apross), junto a la Asociación de Prestadores de Hemodiálisis y Trasplantes Renales del Centro, la Fundación Martini Pro Salud Renal del Niño y el Ministerio de Salud de la Provincia.

Para el cierre de la Semana, el miércoles 16 a las 15 horas, artistas locales brindarán un espectáculo musical a todos los presentes.

También en el Córdoba

En tanto, en el Hospital Córdoba, se realizarán controles preventivos, charlas y actividades especiales dirigidos a toda la población; en especial a mayores de 55 años, y a personas con diabetes o hipertensión, o con antecedentes familiares de enfermedad cardiovascular o renal. Estas actividades tendrán lugar en el Servicio de Nefrología, en el primer piso, desde hoy lunes 7 y hasta el 10 de marzo, de 8 a 12 horas.

La consulta incluye un control físico, la realización de una encuesta y la toma de muestra para laboratorio. Los resultados se entregarán el día jueves 10 de marzo, desde las 11 horas, en el Aula Magna del Hospital Córdoba, en el marco de una charla sobre prevención y cuidados por parte de los nefrólogos del Hospital.

Riñones sanos, desde la panza de mamá

Los riñones comienzan su formación en las primeras semanas de la vida fetal, y la salud de sus riñones y sus vías urinarias dependerá de dos cosas: la carga hereditaria y las condiciones en que el futuro bebé se encuentra dentro de la matriz materna.

Por eso, es especialmente recomendable que las  embarazadas no utilicen medicamentos en los tres primeros meses de gestación, que se alimenten saludablemente, que no fumen ni beban y que no se sometan a estudios de radiación. Trabajar con productos químicos también puede ser peligroso.

Las ecografías en los últimos meses de embarazo permiten saber si los riñones del niño están afectados, antes del nacimiento. En este caso, ese niño debe ser llevado al especialista después de las dos primeras semanas de vida para estudiarlo y decidir su tratamiento, de manera de evitar consecuencias graves en su futuro.

Pero también puede ocurrir que el niño que nazca aparentemente no tenga ninguna afección. Algunos rasgos físicos como la deformidad de las orejitas o pequeñas prominencias en las mismas, la pancita “fofa” o lo que se llama mielomeningocele siempre se acompañan de alteraciones en los riñones o en las vías urinarias. Estos niños deben estudiarse dentro del primer mes de vida.

En el recién nacido, puede ocurrir la enfermedad renal por deshidratación, infecciones, o medicamentos inapropiados. La lactancia materna y una adecuada higiene de los genitales del bebé al cambiar los pañales son formas de prevenir estos problemas.

Síndrome urémico hemolítico 

Se trata de una enfermedad que provoca la falla del funcionamiento de los riñones y anemia, que afecta particularmente a los menores de 2 años. Los niños se ponen pálidos y se hinchan. Todo esto ocurre habitualmente en verano, después de una diarrea.

La mejor forma de prevenir el síndrome urémico hemolítico es evitar el consumo alimentos o leche en mal estado o sin pasteurizar; cocinar completamente las carnes; lavar bien las frutas y verduras (en agua con dos gotitas de lavandina) y evitar la contaminación cruzada cortando las carnes y las verduras con utensilios separados. El lavado de manos, sobre todo para manipular los alimentos, es un requisito básico y la fundamental herramienta de prevención de esta y otras enfermedades.

En el jardín y en la escuela

Las infecciones de las vías respiratorias pueden acarrear enfermedades renales. Las enfermedades eruptivas como el sarampión y la varicela pueden comprometer los riñones. Por eso, mantener al día el carnet de vacunación de los niños es muy importante.

Una alimentación saludable, que evite los alimentos ultraprocesados y la llamada “comida chatarra” –que contienen mucho sodio- es fundamental. Debe evitarse el consumo excesivo de carne, fiambres y gaseosas. Los niños deben ingerir abundante líquido y preferentemente jugos cítricos frescos (no de botella).

El uso prolongado de descongestivos nasales puede provocar hipertensión arterial. Hay que evitar también que el niño permanezca mucho tiempo en ambientes con humo de cigarrillo,

Cuidarlos de los golpes, accidentes y caídas contribuye a evitar lesiones y hasta ruptura del riñón, lo cual se manifiesta por sangrado e intenso dolor.

También hay que estar atentos a los antecedentes familiares de hipertensión u otras afecciones renales.

Cuidar los riñones de los niños forma parte del cuidado integral de su salud. Prevenir las enfermedades renales en los niños redundará en cuidar la salud de los riñones en los adultos, las cuales son altamente invalidantes para el individuo y su tratamiento muy gravoso para toda la comunidad.