- Se trata de una suelta que realizó la Policía Ambiental conjuntamente con el Parque de la – Biodiversidad, la Administración de Parques Nacionales y el Ejército Argentino.
- Previo a su liberación, los animales atravesaron un periodo de rehabilitación.
En la Reserva Natural de la Defensa “La Calera”, la Policía Ambiental realizó una nueva jornada de liberación de ejemplares silvestres rescatados de la tenencia o transporte ilegal, que atravesaron una instancia de recuperación en el Parque de la Biodiversidad y recibieron el alta sanitaria para volver a la naturaleza.
Esta actividad se realizó en un espacio bien conservado y propicio para que los animales tengan una segunda oportunidad, sin correr riesgos de ser atrapados nuevamente.
“Siempre decimos que cada liberación es como el corolario de un importante trabajo interinstitucional y en equipo en pos de la preservación y restauración ambiental”, sostuvo Adrián Rinaudo, secretario de Policía Ambiental.
Por ello, también estuvieron presentes autoridades y miembros del Ejército Argentino, de la Dirección Regional Centro de la Administración de Parques Naturales, del centro de rescate del Parque de la Biodiversidad y de Policía Ambiental, del Ministerio de Ambiente y Economía Circular.

El lugar fue seleccionado por los técnicos ya que tiene una superficie aproximada de 13.660 hectáreas que protegen y conservan una porción importante de ecosistema del Bosque Chaqueño Serrano y el Espinal.
En este contexto resultó conveniente que un chimango, dos cardenales comunes, tres jilgueros, dos reinamoras, un piquito de oro, dos comadrejas y dos zorros grises fueran liberados dentro de las inmediaciones de la Reserva Natural.
Sin embargo, tal como explicó Rinaudo la tarea de reinsertar fauna silvestre no es tan sencilla: “Cada animal que rescatamos en los distintos procedimientos de control que hacemos tiene su historia, su situación particular y cuando llegan a los centros de recates, ellos deben evaluar cuál es la asistencia primaria que requieren y rehabilitación posterior que necesitan”.

Y luego concluyó: “Aunque nos alegra cada instancia de liberación, no todos los ejemplares lo logran; algunos permanecen en cautiverio de por vida y otros mueren. Por lo tanto, el mensaje que nos interesa brindar es que no saquen a la fauna silvestre de la naturaleza, ese es su hogar y no nuestras viviendas”.