Marlen Wayar disertó sobre Diversidad y Derechos Humanos

  • La referente de la lucha por recuperar derechos del colectivo trans fue invitada por la Diplomatura de DDHH que coordina la Secretaría de Derechos Humanos del Ministerio de Justicia.
  • La clase magistral se tituló: “Teoría travesti latinoamericana y derechos humanos”
  • Durante el encuentro hizo un recorrido histórico sobre la construcción del modelo binario y la discriminación sobre la que es sometido éste grupo de personas.

A sala llena se concretó la última clase magistral sobre diversidad que realizan en conjunto la Universidad Provincial y el Ministerio de Justicia a través de la Secretaría de Derechos Humanos de la Provincia. A modo de ritual los asistentes se dispusieron a aprender de la multifacética Marlen Wayar.

La presentación estuvo a cargo de la directora general de la Secretaría de Derechos Humanos, Tamara Pez, quien compartió con el público la extensa participación en la lucha por el reconocimiento de derechos y reparación por el daño causado al colectivo trans.

Entre muchas otras cosas, Marlene Wayar (Córdoba, 1968) es activista travesti, psicóloga social por la Universidad de las Madres de Plaza de Mayo, directora de El Teje –el primer periódico travesti de América Latina– y fundadora de la cooperativa textil Nadia Echazú.  

Además es coordinadora general de Futuro Trangenérico y co-fundadora de la Red Trans de Latinoamérica y el Caribe “Silvia Rivera”.

En su intervención anticipó a las más de cien personas que asistieron de manera presencial y las que siguieron por la plataforma youtube que “Siempre cuando abordamos la temática desde este cuerpo trasvesti respecto a cualquier capacitación de género comienzo a pensar toda la producción que se hizo desde el feminismo latinoamericano y desde el transgénero, de las mujeres afro descendientes y pueblos originarios”. Marlen propone una nueva manera de pensar el transgénero y para ser clara en su clase los resumió en cuatro puntos que a partir de allí se puede construir un nuevo punto de vista respecto a las políticas de género que se hicieron, sus alcances y los que hace falta para lograr una sociedad más igualitaria en términos de inclusión.

“Los cuatro puntos fundantes proponen una manera nueva de pensar el transgénero, que le dan sentido a la epistemología”, explicó Marlen. El primero se trata de una teoría convergente que reúne diferentes producciones con distintas visiones y orígenes que juntas forman una nueva epistemología que propone una nueva manera de mirar. La segunda la llaman ecléctica, viene de la academia, desde las Artes. Bajo esta visión se analiza la producción como industria cultural como expresión de los diferentes grupos. Se pueden usar como herramientas válidas. “Puede ser una pintura, una escultura o un meme”, dice la activista y agrega: “que todo es válido y legítimo”.

El tercer punto habla de la trashumancia que nos remite a los pueblos originarios. Desde esta mirada estudiamos cuales son las riquezas de ese territorio. Marlem se mostró crítica a la intervención que se tiene como sociedad de los diferentes conceptos. “Hemos vaciado de contenido al concepto revolución” e indica: “creemos que hacemos un acto revolucionario porque nos ponemos una remera del Che Guevara”.

La disertante se ocupó de ser muy clara y didáctica a la hora de explicar que debemos tener conciencia de que somos depredadores del territorio. “Producimos basura, nos vamos a otro territorio y dejamos que ese territorio se recupere”. En este sentido, interpeló a la audiencia con una serie de preguntas como por ejemplo: “¿Qué queremos significar cuando decimos la Patria es el otro?”, y agrega: “si el otro responde al patriarcado o no tiene la visión que nosotros venimos luchando desde hace años”. El cuarto punto hizo referencia al prostituismo, hizo una historización desde donde se construye este estereotipo y relató ejemplos de la época de la colonización. Recordó como intervinieron los conquistadores, que visión tenían y como arrasaron con la cultura y cosmovisión que tenían. “Lo afro fue considerado no humano, que no tienen alma, desde allí la lucha fue muy intensa”. Se refirió al pecado nefando que es el que no se puede nombrar y que tiene que ver con todas las formas de relaciones sexuales vinculadas al placer y no la procreación únicamente.

Luego de referirse con ejemplos a la época de la conquista compartió una imagen de Teodoro Bry en donde queda manifiesto de qué manera se introducían los conquistadores y como trataban a las disidencias.

La imagen construye visualmente lo que sucedía en las indias, Bry imitó esa primera visión de los conquistadores en donde se los observa en una primera fila y en el piso arrojados, a los indios e indias que nos respondían a los cánones que ellos pretendían.
A 10 años de la ley de Identidad de Género-Marlen si bien reconoce avances, advierte que aún hoy no se logra trabajar con la sociedad. “Todavía hay una mirada binaria y dadivosa con lo que tienen que ver derechos a recuperar”, asegura la activista y Psicóloga Social.

La referente dijo que nuestro país dictó una ley de avanzada en ese sentido pero hasta ahora no realizó ninguna acción diplomática para que las personas trans sean reconocidas a través de su pasaporte no de manera binaria. Como moderadora estuvo Celeste Giacchetta, quien participó desde el comienzo en la propuesta de la Diplomatura. El encuentro terminó con la intervención artística del dúo poético musical interpretado por Fauno Sirena.