El nuevo espacio del Centro Socioeducativo “Complejo Esperanza” lleva el nombre Carlos Enrique Dattolli

  • Es en homenaje al jefe de seguridad, quien falleció el año pasado.
  • El reconocimiento fue solicitado por los jóvenes del Centro Socioeducativo y el personal que trabajó con él.
  • La placa la descubrieron sus familiares.

El Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, a través de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, le puso el nombre de un trabajador al nuevo espacio del Centro Centro Socioeducativo “Complejo Esperanza”.  A partir de ahora se llama Centro Directivo Administrativo y Espacio Cultural “Carlos Enrique Dattoli” en homenaje al jefe de seguridad, quien estuvo en esa función desde hace dos años, pero cerca de 20 junto a los jóvenes alojados allí, cumpliendo otros roles. 

El acto fue presidido por el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julián López, quien destacó los valores del trabajador y ex combatiente de Malvinas. Dijo: “Ya pasaron 39 años de la guerra y vemos que hoy la sociedad les está reconociendo derechos que antes por distintas circunstancias les negó”. Ponerle el nombre de Carlos Enrique Dattoli a este nuevo espacio donde él trabajó cerca de 20 años con responsabilidad, afecto y compromiso, es un acto de justicia. El ministro manifestó que “hay muchos ex combatientes como Carlos, que continuaron trabajando para la sociedad, él fue un servidor público leal con la Patria, con sus compañeros y con los jóvenes”.

Ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julián López

Luego de la entrada de los abanderados y tras finalizar el himno, el director del Complejo Esperanza, Antonio Franco destacó una faceta de Dattoli poco conocida, fue veterano de la guerra de Malvinas y no sólo eso, sino que defendió la bandera argentina como nadie. “Se la puso como chiripá, hasta que se la descubrieron, quisieron sacársela pero no pudieron, hoy esa bandera está en el Museo de Malvinas”. Franco resaltó la lealtad que tuvo en ese momento con la Patria y dijo: “Es la misma que le transmitía a sus compañeros y compañeras de trabajo y a los chicos”. «Optimista», no bajaba los brazos. Antonio Franco dice que esa palabra está devaluada pero que tiene un significado inmenso: “Es creer que se puede cambiar, Carlos nunca se resignó a que las cosas podían ser de otra manera”, aseguró.

Cada uno de sus compañeros le reconocieron diferentes cualidades, pero todos destacaron que era un gran educador. A los chicos los escuchaba siempre y se empeñaba en trabajar primero, por la restitución de derechos, luego hablaba con ellos para que se responsabilizaran de sus actos y por último trabajaba sobre la reparación del daño que habían realizado. 

Mientras Antonio Franco lo describía de cuerpo y alma a Dattoli, su mujer se secaba con el barbijo las lágrimas. «Nunca imaginé que le iban a hacer este reconocimiento, el Complejo Esperanza era su vida y era tal cual lo describe Franco», afirmó.

Por su parte, la secretaria de SeNAF, Georgina Tavella, dijo que los valores que tenía el compañero son los necesarios para trabajar en estos espacios. “La capacidad para unir grupos o la empatía para poder compartir tareas con sus compañeros o con los jóvenes es lo que hace falta para construir una patria más igualitaria y más inclusiva”. Este homenaje no es un homenaje más, dijo Tavella y agregó: «Se enmarca en los objetivos que tiene SeNAF de levantar los valores de la empatía, honradez, unión y salud como ejes para todos los que trabajamos en el Sistema de Protección de la Niñez y Adolescencia”.

Secretaria de Niñez, Adolescencia y Familia, Georgina Tavella

El acto tuvo su banda. Los jóvenes del taller del Centro Terapéutico, acompañados por su profesor, tocaron un cuarteto y una cumbia con sus cajones peruanos y bongó. El grupo de seis chicos con suficiente energía contagiaron al público que los seguía con el típico movimiento de pies y aplausitos.

La placa– Fue descubierta por su mujer e hijo. La realizaron en el taller de cerámica del Cesam (Centro Socioeducativo donde están alojadas las mujeres) y tiene escrito : “tu ejemplo anima nuestro trabajo cada día”.

En el acto estuvieron presentes los secretarios de Derechos Humanos, Calixto Ángulo y de Gestión Penitenciaria, Cecilia Lanzarotti, la defensora de la Defensoría de la niñez y adolescencia, Amelia López, funcionarios de SeNAF y veteranos de Malvinas, quienes le entregaron una bandera a la mujer de Dattoli.