Esta mañana el gobernador De la Sota hizo entrega de 150 mil pesos a la Asociación de Asistencia Integral al Discapacitado de Villa del Totoral. Los fondos serán destinados a la compra de equipamiento para el Centro de Rehabilitación del Instituto Despertar, dependiente de la asociación, y para la construcción de nuevos gabinetes de asistencia.
Esta organización sin fines de lucro nació hace quince años para dar respuesta a la necesidad de contar con un centro donde desarrollar las potencialidades de gente con discapacidades. Desde entonces trabaja en todos los aspectos relacionados con la asistencia a estas personas.
Un año más tarde la iniciativa continuó con la creación del Instituto Despertar. Luego siguieron gestiones ante el gobierno de la Provincia para el surgimiento de la escuela especial de Villa del Totoral.
“Ese fue un primer escalón importantísimo para la discapacidad en todo el norte de Córdoba. La primera vez que el actual gobernador vino en campaña, se le presentó una carpeta con el proyecto, el gobernador se sensibilizó con él y, al poco de tiempo de asumir su mandato, creó la escuela”, comenta Eduardo Gil, vocal titular de la comisión directiva de esta entidad.
El Instituto Despertar amplía sus servicios a niños y pacientes provenientes de todo el norte de Córdoba. “Aquí vienen niños de Villa de María, de San José de la Dormida. Hay una mamá que trae a su niño en un colectivo desde La Rinconada para recibir rehabilitación. Si la gente sigue viniendo es porque realmente encuentra respuestas, ve la evolución de los pacientes, sus progresos”, comenta Gil, que es bioquímico de profesión.
La rehabilitación no sólo mejora la calidad de vida de los pacientes. Al incrementar la autovalía de una persona, se incrementa también la calidad de vida de su familia.
“Hay personas que precisan asistencia las 24 horas. Si uno de los parientes sale a trabajar, el otro se tiene que quedarse en la casa, y hoy no todos pueden darse ese lujo”, grafica Gil. El panorama se agrava cuando se trata de familias vulnerables, con ingresos reducidos. “Por eso nosotros estamos trabajando por nuestros niños, por supuesto, pero también con el corazón abierto a todos los discapacitados del norte, para que entre todos podamos conseguir una mejor calidad de vida”, agrega.
Agradecimiento
“En nuestros quince años como institución golpeamos puertas de todos los colores y estaturas: políticos, gobernantes. El único que se sensibilizó fue el gobernador José Manuel de la Sota. Y esto no quiero que se vea como una actitud adulona, sino como el reconocimiento de una realidad”, dice Gil.
“Uno puede ver el vaso medio lleno, y decir que el gobernador hizo lo que correspondía. Pero todos tenían esa obligación, y pasaron muchos. El único que se sensibilizó fue el doctor De la Sota. Quise hacerle un reconocimiento con estas palabras. Cuando a un gobernante le reconocen un trabajo, una tarea tan noble, le carga las pilas para seguir trabajando en ese sentido. Me pareció oportuno, y por eso lo hice”, concluye.