Como desde hace más de tres años, el Plan de Desarrollo del Noroeste sigue acercando el progreso a cada pueblo de la región, sobre todo a aquellos rincones que más lo necesitan. Enclavado en un entorno agreste y lejos de las grandes ciudades, el paraje Las Cortaderas –a unos 250 kilómetros de la capital provincial- vivió una jornada más que especial.
La escuela rural Mario Remorino fue sede de las actividades integrales organizadas por el Plan y la Fundación Banco de Córdoba. Los cuarenta alumnos que cada mañana asisten al colegio, la mayoría de ellos viajando en burro o sulky, pudieron disfrutar de los juegos y clínicas. Hubo fútbol, tenis y demás actividades recreativas para que los más chicos se pongan en movimiento.
La salud también tuvo su lugar con la visita del Consultorio Odontológico Móvil, una unidad especialmente acondicionada para el tratamiento y atención de problemas buco-dentales. Tanto niños como adultos pudieron atenderse con los profesionales, lo que para muchos significó su primera visita al odontólogo: “Aunque a veces hay un poco de miedo, los chicos se acercan al móvil y se dejan revisar, saben la importancia de tener una boca saludable”, describe el doctor Darío Caramello, quien encabezó el grupo de dentistas itinerantes.
Luego llegó el almuerzo y el postre estuvo a cargo de alguien muy especial: Doña Jovita, que junto a sus músicos apareció en el comedor de la escuela y les regaló a los chicos algunas de sus historias acompañados por un rico plato de mazamorra. El entrañable personaje de José Luis Serrano es un habitante más de este suelo de Traslasierra y se mimetiza perfectamente con el entorno. “Miro estos montes, siento ese aroma de la comida y me traslado a mi niñez con mis abuelos en las afueras de Villa Dolores”, rememoró el actor antes de darle la sorpresa a los chicos.
La jornada prosiguió con la entrega de equipamiento para la escuela, como netbooks y material informático, semillas para huertas orgánicas, ejemplares de libros para la biblioteca y algunos regalos para los más chicos. Una de las anfitrionas de la escuela, Nélida Oyola, directora del Nivel Primario, destacó las obras del Plan y la Fundación en el establecimiento, de las cuales los chicos son los más beneficiados.
También Ignacio Paoli, uno de los coordinadores del Plan en el departamento, afirmó: “No es la primera vez que estamos aquí. La gente ya nos conoce, sabe que los escuchamos y que pueden contar con nosotros”.
La jornada concluyó con los últimos relatos y canciones de Doña Jovita en el patio de la escuela rural de Las Cortaderas. Un cierre estupendo para un día que los grandes y chicos de este paraje no olvidarán. Allí estuvieron la Fundación Banco de Córdoba y el Plan de Desarrollo del Noroeste, otra vez acercando el progreso a aquellas comunidades que trabajan en silencio, pero con mucha humildad y grandeza.