«No lo Dejes al Azar» es un programa de la Agencia Córdoba Joven que se está ejecutando desde mayo de este año. A través de éste se brinda orientación vocacional-ocupacional a alumnos de cuarto, quinto y sexto año de colegios secundarios de toda la provincia, sumando estas acciones a las que lleva adelante el Ministerio de Educación, a través de su subsecretaría de Igualdad y Calidad Educativa.
La intención es dejar una puerta abierta y una posibilidad de intercambio para que los jóvenes puedan encontrar algunas alternativas y respuestas propias a la pregunta: ¿Qué quiero para mi vida? Pregunta que no tiene una única respuesta y que se renueva a lo largo de la vida. En este sentido, el trabajo sobre los aspectos a tener en cuenta en la toma de decisiones les proporciona a los jóvenes herramientas que les servirán para futuras elecciones de vida, no sólo las vocacionales: “Pensar en las elecciones de estudio, trabajo u otras posibles, necesariamente lleva a mirar detenidamente cómo influyen sobre ellas las tradiciones y valores familiares, las representaciones sociales que circulan sobre determinadas carreras y trabajos, las experiencias escolares, las propias modalidades de elección, los prejuicios, temores y expectativas”, dice Verónica Castañeira, una de las responsables de llevar adelante las charlas.
Desde su implementación hasta ahora, las actividades llegaron a localidades como: Alta Gracia, Villa del Totoral, Río Cuarto, Despeñaderos, Deán Funes, Corral de Bustos, Oncativo, La Calera y distintos barrios de la ciudad de Córdoba, alcanzando a más de 1500 alumnos de distintas instituciones educativas.
Trabajar sobre el futuro
Los encuentros son coordinados por un equipo de profesionales especializados en Orientación Vocacional con vasta trayectoria. Son miembros de Calma, una Institución que realiza diferentes intervenciones en este campo, tanto de forma virtual como presencial.
“La dinámica es participativa, ya que la voz de los jóvenes es fundamental para ponernos a trabajar sobre el futuro, es por ello que las iniciamos preguntando cuáles son las inquietudes, expectativas y temores que les surgen cuando piensan en el futuro. Están dirigidas a sensibilizar a los jóvenes sobre la importancia de tomarse un tiempo de conocimiento personal y de investigación de las opciones educativas y laborales, antes de elegir, como acción preventiva”, explica Castañeira.
A partir de distintas actividades se genera un espacio de reflexión en el cual cada joven construye su perfil personal. Esto les permite encontrarse con sus intereses, preferencias, habilidades y valores más significativos, realizando una autovaloración reflexiva: “La idea es que puedan llevarse algunas lucecitas o pistas, orientando un camino posible. Se les entrega un cuadernillo con lecturas y diferentes actividades vinculadas al conocimiento personal y a las opciones educativas y laborales disponibles”.
La voz de los participantes
Según la especialista, la recepción de la propuesta ha sido muy buena, no sólo por los jóvenes que son los principales destinatarios, sino por la comunidad educativa en su conjunto. Los jóvenes valoran mucho la propuesta, planteando que luego de las charlas se sienten “más seguros” y “más tranquilos”.
“Trabajamos con dos ejes que son fundamentales para elegir: el conocimiento personal y el conocimiento de las opciones educativas y laborales. Insistimos que el conocimiento personal es el “GPS” que orienta la búsqueda de opciones. Proponemos herramientas, algunos tips, reflexiones y preguntas a tener en cuenta al momento de elegir para ayudarlos a pensar cuál sería la mejor jugada ya que nadie puede elegir por ellos”, culmina.