Aunque todavía quedan algunos puntos de la ciudad con agua en las calles y hay campos aledaños anegados, en las últimas horas ha mejorado la situación en Obispo Trejo, la localidad del departamento Río Primero distante a 127 kilómetros de la capital provincial, que sufrió los efectos de las abundantes precipitaciones registradas el fin de semana.
Los trabajos coordinados de las áreas provinciales de Vialidad y Recursos Hídricos, que incluyeron la remoción de sedimentos bajo el puente del río Jesús María, el armado de terraplenes para impedir que ingrese al poblado el agua del sector rural, la incorporación de otra bomba de agua, permitieron atenuar el efecto de la inundación en la localidad, y atender la situación en las viviendas, donde ya no queda agua.
Según lo informado por los técnicos del Ministerio de Desarrollo Social, en horas del mediodía de hoy la cifra de evacuados se había reducido un tercio respecto de ayer, cuando hubo que dar refugio a 118 vecinos. A esta hora, 35 personas permanecen evacuadas.
El organismo provincial ya dispuso el otorgamiento de una ayuda económica a la comuna para atender la contingencia. En tanto, en horas de la tarde de ayer se constituyó un comité de emergencia conformado por las fuerzas vivas del pueblo y los técnicos del ministerio, lo que permitió afrontar ordenadamente las demandas de los evacuados y brindar seguridad a las zonas que permanecían preventivamente sin luz en las manzanas afectadas por el agua.
Durante esta jornada, luego de las inspecciones domiciliarias para verificar las condiciones de seguridad, se comenzará a devolver el suministro de energía. Igualmente se sigue brindando comida y alojamiento a los damnificados por la situación.
Posteriormente, personal de la Provincia comenzará el relevamiento de los daños sufridos en las viviendas, para instrumentar la ayuda a los pobladores afectados por la precipitación que superó los 250 milímetros en pocas horas.