Internas de la penitenciaría de Río Cuarto colaboran en la producción de pelucas para pacientes oncológicos

  • Realizan cortinas de cabello junto a la asociación civil “Trenzar Lazos”, dedicada a la confección y donación de pelucas.
  • La actividad forma parte de las políticas de resocialización de las personas privadas de la libertad y humanización de los contextos de encierro.

Desde hace dos meses, un grupo de mujeres del Establecimiento Penitenciario N° 6 de Río Cuarto, realizan cortinas de cabello para pelucas que la asociación civil sin fines de lucro “Trenzar Lazos” dona a pacientes oncológicos que no pueden costearlas.

El espacio surgió con el propósito de brindar opciones de actividad a quienes se encuentran transitando situación de encierro. Conociendo la necesidad de pelucas para personas que han perdido su cabello, la subdirectora de Tratamiento Penitenciario del Establecimiento, Emilse Hidalgo, ideó junto a su equipo un taller de encuentro y trabajo. Para ello, se contactó con la asociación nacida en la ciudad de Río Cuarto.

Me cayó del cielo, es lo que necesito”, pensó Susana Heredia, presidenta de Trenzar Lazos, cuando recibió la propuesta.

La asociación está compuesta por cinco personas que destinan gran parte de su tiempo a este trabajo, además de cumplir con sus obligaciones laborales y familiares. Pero esa dedicación no es suficiente para satisfacer la demanda que reciben. Tampoco han tenido resultado las colaboraciones ofrecidas. “Los voluntarios lo hacen un tiempito y no lo mantienen”, cuenta Susana.

Por ello, llegar al Establecimiento Penitenciario a coordinar el taller y encontrar una muy buena recepción por parte de las internas fue una sorpresa agradable. “Pensé que quizá se iban a aburrir o no les iba a gustar, pero están fascinadas”, describe Susana.

Unidas por el compromiso

Giuliana participa del taller desde el día uno. “Estoy muy contenta de poder ayudar a las personas que sufren una enfermedad, de aportar un granito de arena desde el lugar donde estamos para que se sientan mejor”, resalta.

Aparte de sentirse socialmente útil, el taller brinda otras satisfacciones. “Porque uno hace lo que le gusta, nos entusiasma, nos entretiene, entonces se pasa volando la hora. Estaría lindo que fuera todos los días”, comenta Giuliana. El espacio trenza los lazos internamente entre las compañeras: se ayudan y comparten juntas, se van conociendo y la actividad las va uniendo.

Para realizar las cortinas de cabello, la asociación trae el pelo y cintas de papel. Las chicas aprendieron a limpiar el pelo, sacarle lo que no sirve y a separarlo por tono para ir adhiriéndolos a la cinta por mechones. 

Las primeras cortinas eran un desastre”, recuerda Giuliana, y agrega: “Nos perfeccionamos, ahora tratamos de gastar lo menos posible de pelo, de cuidarlos”. 

Finalmente, Belén, la alumna avanzada del taller de costura, es quien pasa las cintas por la máquina de coser.

En la confección de pelucas, las cortinas y su costura es el paso que lleva mucho tiempo. Sin embargo, la elaboración del taller superó las expectativas de Susana: “Con la cantidad de cortinas que han hecho las chicas en dos meses, yo creo que tenemos para más de cinco pelucas. Imagínate lo que va a ser un año”.

La propuesta ha tenido mucha repercusión. El entusiasmo de este primer grupo contagió a las demás, indica Emilse Hidalgo. Por lo que se está evaluando abrir otro taller para que participen más mujeres que se encuentran alojadas en el Establecimiento Penitenciario.

Sobre Trenzar Lazos

Trenzar Lazos es una organización sin fines de lucro cuyo propósito es crear un banco de pelucas para que los pacientes oncológicos puedan obtener una sin costo. Según explica Susana Heredia, es la única organización dedicada a la confección y donación de pelucas en la provincia de Córdoba.

Sus pelucas llegan a personas de todo el país. En sus seis años han donado más de 650. El único requisito es completar un certificado por parte del médico tratante y presentar una foto.

El esfuerzo de este grupo solidario es a pulmón. Trabajan con insumos donados; requieren donaciones de cabello, cintas de papel de 18 mm y sobres oficio para realizar las entregas, entre otros elementos.

Se puede contactar a la asociación a través de sus redes sociales (Instagram y Facebook). Su sede se encuentra en Vicente López y Planes 433, ciudad de Río Cuarto.