Estudiantes de Bouwer también eligieron autoridades de la UNC

Por primera vez en 400 años, los cuatro claustros de la Universidad Nacional de Córdoba votaron ayer en elección directa a las autoridades que conducirán el Rectorado. Hugo Juri, de SOMOS, fue el ganador por amplio margen. Pero más allá del resultado, fue una jornada histórica de la que también participaron estudiantes de diversas carreras que están privados de su libertad.

La elección de la universidad más antigua del país no es un hecho menor. Se trata del tercer padrón más importante de Córdoba, sólo superado por el provincial y el de la Capital, con más de 240.000 votantes entre docentes, estudiantes, no docentes y egresados. Y de ese universo, ayer hubo 127 estudiantes habilitados para votar que cursan sus estudios universitarios en las instituciones carcelarias de Bouwer y EP3, que alberga a mujeres.

“Todo lo que sume es para mejor”, dijo Hernán, estudiante de segundo año de Bibliotecología. “Ojalá que estas elecciones traigan cosas mejores para nosotros”, agregó. Marcelo, estudiante de la misma carrera, también dijo sentirse “muy feliz de ser parte” de la jornada democrática. “Le digo a los docentes y autoridades de la universidad que no tengan miedo de venir a trabajar con nosotros, acá van a encontrar una respuesta favorable, no los vamos a hacer quedar mal”, agregó, en relación a que lo candidatos no pudieron ir a exponer sus propuestas personalmente.

“Es un momento en aprendizaje: sobre todo a ejercer la ciudadanía”, señalaron ayer docentes del Programa la Universidad en las cárceles (PUC) que ya lleva 20 años trabajando en las instituciones penitenciaria y depende de la Facultad de Filosofía y Humanidades.

La elección directa es importante ya que, hasta hace poco, las autoridades eran elegidas por un grupo de alrededor de 300 personas, que conforman la Asamblea Universitaria. Las fórmulas que se presentaron para el rectorado fueron tres. SOMOS, encabezada por Hugo Juri, actual rector; VAMOS, con Gustavo Chiabrando a la cabeza; y AVANZAR, el espacio de Patricia Altamirano.