Una doble celebración, la del Día de la Danza y del Día del Trabajador, vivió hoy el Espacio Sociocultural y Recreativo Arturo Illia que depende de la Caja de Jubilaciones, Pensiones y Retiros.
Como ya es tradición en el Illia, el festejo fue buena ocasión para que los viejos que asisten al espacio pudieran exhibir y compartir las destrezas adquiridas o desarrolladas en los diferentes talleres que allí se dictan. Y es que más que reuniones formales, las celebraciones del Illia son ámbitos de socialización y participación con un solo y simple objetivo: divertirse.
Así fue como por el escenario pasaron integrantes de los talleres de danza árabe, folclore y ritos latinos y también del taller de teatro, llenando el tablado de merengue, tango, bailes típicos argentinos y flamenco Con su entusiasmo y alegría, de alguna manera todos vinieron a darle la razón a la bailarina estadounidense Martha Graham quien advertía que “los grandes bailarines no son geniales por su técnica sino brillantes por su pasión.