El bombero Jorge Pereiro detalló cómo fue el rescate en Bariloche

El bombero voluntario cordobés Jorge Pereiro llegó esta tarde a Córdoba con la enorme satisfacción de haber encontrado con vida a Joaquín Santos, el joven oriundo de Buenos Aires que permanecía extraviado en la zona de la Pampa Linda (Bariloche) desde el 6 de enero pasado.

Pereiro es paramédico, pero se desempeña también como rescatista en el cuartel de Bomberos Voluntarios de Mendiolaza. Junto a sus perros Kona y Batón se embarcó el pasado sábado en la misión de rastrear a Santos, colaborando con el trabajo que ya se venía realizando con rescatistas de la zona.

“Cuando yo me sumé a las tareas, ya habían trabajado centros con perros de rastro específico, descartando lugares. Ellos ya tenían el plan de trabajo armado. Es gente que conoce muy bien la montaña, expertos rescatistas de allá, con los que tuve la oportunidad de trabajar”, señaló Pereiro.

“La gente de la comisión de auxilio del Club Andino de Bariloche venía trabajando hacía unos seis días, buscándolo(a Joaquín Santos). Habían hecho la parte gruesa del trabajo. Es una zona súper complicada para trabajar, estuvieron buscando inclusive con cuerdas en paredes verticales, haciendo 30 o 40 rapeles por día, descartando zonas. El día del hallazgo habíamos descartado la zona del río con el otro perro (Baton)”, explicó el cordobés.

“Fui con dos perros. Usamos uno a la mañana y otro a la tarde para darles descanso. Al mediodía nos helitransportaron a la zona de la laguna Dillon. Hicimos esa zona, cuando estábamos terminando una parte, el perro tomó un olor, nos dio un indicativo fuerte de que estaba tras un rastro. El perro no lo puede cerrar, técnicamente es como que no termina de resolver la situación y el rastro se le pierde en un momento, rastro que venía por el aire”, detalló el bombero voluntario, quien además explicó que el trabajo de los binomios se da de esta manera ya que es justamente la dupla hombre-can, la que logra estos resultados.

“Acá es 50 por ciento trabajo de la guía de montaña de allá, de todo el equipo y 50 por ciento del perro. Es todo un equipo que trabaja. Pensar que un perro solo encontró a una persona no está bien. Uno usa el olfato del perro como una herramienta. Pero si uno no es puesto en el lugar correcto, ni está cómodo ni entero para trabajar, el resultado no es así”, expresó Jorge Pereiro, quien además valoró el trabajo diario de los Bomberos Voluntarios y el apoyo de las entidades gubernamentales para el desarrollo de estos operativos.

Cómo fue el rescate

“La guía local me venía guiando. Nos alejamos del sendero unos 150 metros, subimos a una loma y nos tiramos al Este para buscar el sendero de nuevo. El perro (Kona) antes de subir a la loma levantó la nariz y salió corriendo de nuevo. Apuramos el paso con una ansiedad importante, y a 15 o 20 metros, venía Joaquín. Fue una sorpresa increíble para todos”, contó Pereiro y agregó que Santos se encontraba un poco desorientado.

“Joaquín me pedía que lo guiásemos a un sendero, a un refugio, que lo sacáramos de ahí. Le explicamos que éramos el equipo de rescate, que ya estaba, que se había terminado todo. Le sacamos la mochila, porque venía cargado. Estaba mucho más flaco. Empezamos a trabajar con el cuidado de la exposición, lo abrigamos, le dimos comida, infusiones calientes; la gente de allá está muy preparada”, añadió.

Según el rescatista, la clave de supervivencia de Joaquín estuvo radicada en la cercanía de una cascada de agua dulce que lo mantuvo hidratado, y en el racionamiento de la comida que tenía, más allá de la carpa y el aislante que pudieron mantenerlo guarecido del frío.

“Cuando uno encara una búsqueda, intenta ser lo más positivo posible. Tratando de inyectar una dosis de esperanza a la gente que ya viene trabajando hace días. Siempre hace falta ese mensaje esperanzador. Encontrarlo fue de esas sensaciones que no se pueden comprar. Son inyecciones de adrenalina que a uno lo llevan a motivarse y seguir creciendo en la especialidad”.

“Los primeros consejos para la gente es que se registren en la oficina de parques nacionales, y dejar ahí un plan acerca de lo que quieren hacer. Si la gente no tiene experiencia en la montaña, no debería subir sola, sino con guías”, apuntó con buen tino Jorge Pereiro.

Sobre el cuartel de Bomberos Voluntarios de Mendiolaza

“Nosotros tenemos una brigada que está a disposición para cuando haga falta, siempre que las condiciones lo ameriten. Somos un cuartel de voluntarios. Uno tiene otro trabajo y éste de voluntariado. Uno trata de acomodar los días para no tener problemas en el trabajo con el que uno vive”, relató el joven que además de ser voluntario se desempeña como paramédico en un equipo de emergencia.

Pereiro explicó que el trabajo no sólo es de él sino también de todo el cuartel, y señaló: “Creo que hay que valorar el sacrificio que hacen todos los voluntarios de Córdoba, que crecen por sacrificio y vocación. Hay que tratar de apoyar eso para que siga siendo posible. La idea es formar a la gente que viene después”.

Claudio Vignetta, Secretario de Gestión de Riesgo Climático y Catástrofes de la Provincia de Córdoba, reconoció a Pereiro y a sus canes con un diploma y medallas, a la vez que celebró el trabajo de los binomios cordobeses que (tal y como sucedió en el Caso Maldonado) deja a Córdoba dentro de los destacados en estos operativos: “Estamos orgullosos de Jorge y del sinnúmero de Bomberos Voluntarios que todos los días realizan rescates. Nuestros Bomberos Voluntarios son Héroes y demuestran todos los días que son un orgullo para la Provincia”.