El ministro de Desarrollo Social, Daniel Passerini, confirmó hoy la detención de dos hombres, luego que víctimas de violencia familiar activaran el dispositivo antipánico SALVA. Ambos casos ocurrieron en la ciudad de Córdoba. Por la tarde, un hombre pulsó la señal S.O.S para alertar a la policía ante la llegada a su domicilio de su sobrino, quién en reiteradas oportunidades ya lo había agredido. Minutos más tarde, fue una mujer quién activó el aparato ante la presencia de su ex pareja, quién ingresó a su vivienda por la fuerza y en estado de ebriedad.
Passerini afirmó que «de los 300 dispositivos entregados en la ciudad de Córdoba, 3 están en poder de hombres agredidos por miembros de su propia familia. Son situaciones de violencia intrafamiliar que se repite y que por ese motivo la Justicia decidió que tuvieran un botón antipánico. El hombre que activó hoy el dispositivo había sido agredido meses atrás con un arma de fuego» sostuvo.
Con los dos capturas de hoy, suman 18 los agresores detenidos por la Policía de Córdoba ante la acción del botón de alerta. Esta herramienta contra la violencia familiar está actualmente disponible en la ciudad de Córdoba, en Villa María y en Río Cuarto. En las próximas semanas, luego de concluidas las pruebas técnicas, el aparato también estará en funcionamiento en otras 8 cabeceras departamentales del interior de la provincia: Alta Gracia, Cruz del Eje, Deán Funes, Jesús María, Río Segundo, San Francisco, Villa Carlos Paz y Villa Dolores.
Sistema de Alerta para Víctimas de Violencia Familiar (SALVA)
En la implementación del sistema SALVA intervienen de manera articulada distintos organismos del Estado: Los dispositivos antipánico son provistos por el ministerio Desarrollo Social y se otorgan a personas en riesgo, según lo dispuesto por el Poder Judicial en función de la gravedad de cada caso. La Policía se encarga de monitorear su funcionamiento y acude a resguardo de la víctima al momento de activarse el aparato.
El botón antipánico es un pequeño dispositivo tecnológico muy parecido a un teléfono celular con tres funciones concretas: Un botón de alerta S.O.S en el centro del aparato que al activarse es detectado por la Central de Policía, indicando domicilio e identidad desde donde proviene la llamada; una segunda función en la que el aparato graba la conversación desde el momento mismo en que es activado. Además, también, la víctima puede comunicarse de manera directa con una operadora de la dirección de Violencia Familiar para recibir asesoramiento o información relacionada con la causa judicial que la involucra.
Al momento de la entrega del botón SALVA a la persona agredida, se realizan reuniones individuales para capacitarlas en el uso del instrumento y brindarle la contención y el acompañamiento adecuado. En la última reunión prevista, la persona que recibe el dispositivo lo prueba en reiteradas ocasiones y observa en pantalla la manera en que se activa la alarma.