- La Secretaría de Prevención y Asistencia de las Adicciones brinda recomendaciones para disfrutar de unas fiestas saludables y evitar el consumo de sustancias.
Es importante recordar que el consumo de alcohol es uno de los hábitos que genera más consecuencias negativas. Según la OMS, cada año se producen 3,3 millones de muertes en todo el mundo debido al consumo nocivo de alcohol. En los jóvenes, el alcohol se asocia a infecciones de transmisión sexual, embarazos no intencionales y también situaciones de violencia y accidentes.
Sin embargo, como responsables de crianza, las personas adultas pueden influir positivamente en los más jóvenes a la hora de prevenir las conductas poco saludables producidas por el consumo de alcohol y otras sustancias.
Numerosos estudios señalan que la mayoría de los niños y niñas comienzan a beber en ambientes familiares. Por eso, es fundamental que en las celebraciones se evite promover el consumo de alcohol en los más jóvenes.
Además, es necesario mencionar que también los niños, niñas y adolescentes que perciben un mayor consumo de alcohol en sus padres, minimizan los efectos negativos de la ingesta de bebidas alcohólicas. En este sentido, las actitudes de los adultos pueden ser uno de los mayores factores de prevención de consumo de alcohol en los más jóvenes.
Dar el ejemplo es una herramienta clave en relación con la prevención. También, es importante generar espacios cotidianos de conversación sobre los riesgos del consumo de alcohol y otras sustancias. Además, es clave prestar atención a las reuniones y celebraciones de adolescentes y jóvenes, conocer dónde se reunirán y con quién, saber si habrá personas adultas presentes y cuidar que lleguen en forma segura a los lugares de encuentro.
Las fiestas son un momento significativo para acercarnos a las personas y cosas que son importantes para cada uno de nosotros. Por eso, durante estas fechas, cuidémonos entre todos; disfrutemos y celebremos de manera saludable.