Historias de emprendedores en la Feria de Artesanías

Desde un emprendedor adolescente que, con apenas 14 años, maravilla con su habilidad para el calado de madera, hasta una laboriosa tejedora que puede garantizar un novedoso poncho/pollera para enfrentar sin temores los rigores del más crudo invierno, la Feria Internacional de Artesanías 2014 se ha transformado en una vidriera atractiva para 15 expositores que llegaron hasta el Pabellón Verde de Feriar de la mano de la Fundación Banco de la Provincia de Córdoba (FBC).

El director , Miguel Majul, expresó su satisfacción por la «rica experiencia» que está viviendo la entidad  que ha financiado la presentación de emprendedores de distintos lugares del interior provincial y la capital .»Hicimos una selección de proyectos y los beneficiados pueden estar aquí sin costo.Le brindamos un espacio y la oportunidad de mostrarse en un lugar donde mucha gente puede entrar en contacto con lo que hacen».

Majul explicó: «A la FBC le interesa ir un poco más allá del mero acompañamiento financiero porque consideramos que a pesar del esfuerzo que ellos hacen , a veces se produce un cuello de botella  en la comercialización. Son productos  excelentes, dignos de ser mostrados «.

El antecedente inmediato son las cuatro  muestras que la Fundación auspició el año pasado con el título de Ferias de los Frutos  donde pudieron comprobar la calidad de las realizaciones. Señaló Majul que «eso nos motivó para que en 2014 realizáramos un trabajo en conjunto con el gobernador De la Sota  y el Consejo Federal de Inversiones para poder estar presente  en esta Feria.

El funcionario adelantó que la Fundación Banco de Córdoba analiza la posibilidad de que estos emprendedores puedan estar en otras exposiciones del interior provincial: «Aspiramos a mostrar lo que estos emprendedores hacen en 10 muestras regionales», detalló.

Para la trigésimo segunda edición de la Feria Internacional que se inició el jueves 10 y se extenderá hasta el 20 de este mes , la Fundación ha montado un stand en el Pabellón Verde  en el que han desplegado sus trabajos 15 emprendedores pertenecientes a 8 departamentos provinciales.

La oferta es variada y ha sido seleccionada para tratar de competir exitosamente con cerca de 700 expositores llegados de distintas provincias y de Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay, Perú, Paquistán, India, Indonesia, Egipto, Siria, Ecuador, Nepal y Colombia.

Tomás tiene apenas 14 años, es de Los Surgentes y acompañado de su orgullosa madre, Stella de Noguera exhibe en las paredes retratos de Gardel y Atahualpa Yupanqui que realizó con la técnica conocida como calado de madera.Dice que la aprendió en Cruz Alta, el pueblo vecino al suyo, y que la ha perfeccionado a lo largo de 3 años.

«Sé que llama la atención que sea tan joven.Eso hace que la gente se acerque y pregunte y  yo estoy feliz de explicarles sobre el trabajo .Y espero poder vender algo», dice sonriente .

A la vuelta, Mauro Sosa intenta revelar los secretos de su arte al público que se llega hasta el stand para admirar sus instrumentos musicales.Es luthier  y recuerda que en octubre del año pasado lo invitaron como representante de La Granja a una feria que se desarrollaría en Saldán.Fue entonces que tomó contacto con la Fundación  y obtuvo la ayuda para presentarse en la muestra que se está desarrollando en Feriar. La gente que se acerca pide datos sobre los instrumentos «a los que la mayoría considera exóticos porque son africanos».

Carmen Estrada es de Quilino y hace cerámica artesanal.Desde la sabiduría que le da su condición de artesana veterana  celebra esta nueva oportunidad que le ha brindado el microcrédito de la FBC para mostrar los objetos que crea a un público multitudinario.

«Estuve en otras muestras, en Ushuaia y Rio Grande, pero  yo tenía el problema que no disponía de horno  y tenía que trasladar mi producción a la ciudad de Deán Funes, que queda a 28 kilómetros. Era un tanto trabajoso y  las piezas  que son muy frágiles corrían riesgo de romperse por el camino.Felizmente el año pasado me enteré de que la FBC daba préstamos».

Cuenta Carmen que el primer aviso que vio decía «Córdoba joven» y a pesar de que es una veterana de mil batallas entró, contó lo que hacía y consiguió el préstamos para adquirir el horno que le ha dado una nueva perspectiva «y seguridad en lo que hago».

Margot Urioste intenta ganarse un lugar importante  a través de la producción de sábanas y manteles.Despliega todo su encanto de creadora para ponderar las bondades de las sábanas de polar-«una invención mía», asegura-habla de un juego extra grande para sommier bordado a mano y convence a todo el mundo de que los 800 pesos que hay que pagar para llevárselas son , casi, un regalo.

Susana y Carmen, por su parte, se ocupan de difundir las bondades de tejidos artesanales en telar.»Estamos agradecidas de la oportunidad que nos han dado para estar en la Feria; el lugar es espectacular y nos asisten chicos que son encantadores».

Las tejedoras aseguran que la gente se les acerca para conocer el origen de la prenda y cuando se dan cuenta de que es realmente artesanal no se les ocurre objetar el precio.