Rindieron culto a la palma con tradición y folklore

No habían sonado las campanas de la Catedral del Norte Cordobés y los vecinos ya habían ocupado todas las sillas ubicadas en la plaza principal. Esperaban la señal de largada del trigésimo festival de la palma.

Todos los años, San Francisco del Chañar rinde culto a la palma caranday, noble planta que por años es materia prima de productos y artesanías típicas de la zona norte provincial, en un festival que convoca al pueblo, visitantes, artesanos y músicos populares.

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El gobernador de la Sota estuvo en la primera fila acompañado por el intendente Marcelo Eslava y otros funcionarios de zonas vecinas. Esperaban la señal de bienvenida: sonaron las campanas y una procesión de gauchos y paisanitas acompañaron hasta el escenario al Santo Patrono San Francisco Solano. Se dio la bienvenida y comenzó la fiesta.

Con la plaza repleta y el entorno del camino Real, se cantó el himno y se lanzaron los fuegos artificiales. Una apertura esperada y trabajada: “Mantenemos viva las tradiciones y cultura de nuestro pueblo”, dijo el intendente Marcelo Eslava.

Comenzó la fiesta y el ballet inició su baile. La gente acompañaba sus cantos y movimientos con conocimiento y alegría. Cada número era esperado. El intervalo fue para los sorteos de electrodomésticos que la provincia obsequió como regalo a la fiesta. Se sortearon cocinas, heladeras y motocicletas.

Nadie se movía de sus sillas, eran las dos de la mañana y se anunciaba la llegada de Abel Pinto, no era la primera vez que venía de visita pero sus fans se comportaban como si fuera la primera vez que lo tendrían cerca con su cancionero. El festival cierra esta noche con Sergio Galleguillo y la plaza promete convertirse en una gran fiesta copada de bailarines, sabores típicos como los exquisitos cabritos norteños y algarabía hasta la madrugada.