El jueves a las 17, el Centro Cultural Córdoba pone en pantalla el exitoso largometraje paraguayo 7 Cajas, estrenado en 2011. La trama que llevó a la pantalla esta historia excede el éxito de la que luego fue protagonista, pero no sólo por la calidad cinematográfica, sino por lo que implicó su realización. El germen de la idea comienza en 1991, cuando los directores Juan Carlos Maneglia y Tana Schémbori estaban cubriendo una nota en el Mercado 4 de la ciudad. Ese lugar es una gran feria y corazón de la ciudad de Asunción, donde conviven no sólo los comerciantes, sino también actividades ilegales de todo tipo: narcotráfico, prostitución, piratería, juegos ilegales. Ahí decidieron que debería transcurrir una historia y que esa historia debía esta protagonizada por un carretillero, las personas que llevan las mercaderías de una punta a la otra de la feria en carretillas de madera.
La tarea no sería fácil: en Paraguay no existe ley de cine, ni apoyo de ningún instituto para el sector y en la ciudad solo están habilitadas 10 salas. La producción local es casi nula.
En 2004, de todos modos, retomaron el proyecto y decidieron trabajar con el guión. En 2006 la tarea estaba lista: 7 cajas ya tenía forma y solo bastaba con empezar a buscar fondos. Pero otro imprevisto saldría al cruce: a los directores le robarían el auto con el guión adentro, dejándolos de nuevo en cero.
Sin demasiadas esperanzas hicieron una campaña pública pidiendo su devolución. El milagro ocurrió: desde la cárcel de Tucumbu los llamaron para devolvérselos a la semana. Tres años después, Maneglia y Schémbori realizaron el casting sólo con actores debutantes y fueron convocados 600 extras.
Luego de ganar un subsidio en el Festival de San Sebastián la película quedó lista para su estreno en 2012, justo 20 años después de aquella primera idea inicial. 7 cajas fue estrenada en tres salas de la ciudad: en la pantalla se podía ver la historia de ese carretillero que tiene que transportar la mercadería secreta de un lugar a otro, sorteando persecuciones y obstáculos. Todo el largometraje es hablado en Yopará, un dialecto que mezcla el español con el guaraní, por lo que la película tuvo que ser subtitulada.
A la semana de su estreno todo el país hablaba de la película: la crítica la elogiaba y en un mes superó a la audiencia de Titanic, hasta el momento la película más vista en le historia de Paraguay. Es que 7 cajas había logrado otro imposible: en el reino del comercio ilegal, los directores pidieron establecer un pacto: le pidieron a los manteros que no circule ni una copia ilegal de la película, era una manera de apoyar lo que empezaba a suceder con el cine en ese país. Los manteros cumplieron: en los meses que estuvo en cartel, no hubo ni siquiera copias en Internet, ya que si alguien subía la película, otros se encargaban de sacarla de circulación. El que quería saber que había en esas 7 cajas, tenía que ir al cine.
Tres años después de aquel estreno, el Centro Cultural Córdoba pone a 7 cajas de nuevo en pantalla. Será cuestión de aprovechar de nuevo la oportunidad y seguir la historia de los carretilleros hasta conocer el final. La película se proyectará el jueves 21 a las 17 y repite martes 26 y miércoles 27, a las 17 y a las 21.
Entrada general: 30 pesos, estudiantes y jubilados, 15 pesos; estudiantes de cine, 3 pesos.