¡BarrancAbajo! en el Campo de la Ribera

En el marco del Día Nacional por la Memoria, la Verdad y la Justicia, a través de una acción conjunta entre el Teatro Real y el Espacio para la Memoria, Promoción y Defensa de los Derechos Humanos Campo de la Ribera, se presenta la Comedia Cordobesa con la obra ¡BarrancAbajo!, en este espacio emblemático de la recuperación de nuestra historia.

El martes 25 de marzo a las 15, el elenco provincial pondrá en escena su versión libre del clásico de Florencio Sánchez, escrita y dirigida por Edgardo Dib. La función está destinada a alumnos de colegios secundarios de la zona y público en general con entradas sin cargo.

Luego de una exitosa Temporada 2013 en Córdoba Capital e Interior y tras su presentación en el Teatro Nacional Cervantes de Buenos Aires, este clásico de la dramaturgia rioplatense que habla del desalojo, la pérdida del sentido de pertenencia y el quiebre de los vínculos familiares es un material vivo para reflexionar sobre nuestra historia.

Ha pasado más de un siglo desde que aquel texto subió por primera vez a escena pero la desesperanza de la familia Carabajal sigue estremeciendo los cuerpos de los actores y emocionando al público.

Cuándo y dónde

Espacio para la Memoria, Promoción y Defensa de los Derechos Humanos Campo de la Ribera (Martín Cartechini s/n – Bº Maldonado). Martes 25, 15 hs.

Un clásico con ecos del presente

El planteo temático desde la teatralidad de Sánchez es el que justifica la elección del material para este proyecto que no sólo conlleva fines artísticos sino también sociales. Poder “hablar” desde el arte sobre un flagelo tan actual como el desalojo, la pérdida de lo construido por el esfuerzo del trabajo y la fragilidad de las relaciones humanas es el objetivo que inspira esta puesta.

Para “entrecruzar” estos dos tiempos – el de Sánchez y el nuestro – se decidió por una puesta en escena que, desde sus signos teatrales, convivan lo contemporáneo con lo histórico. De este modo, en la escena, lo histórico está construido desde la palabra de Sánchez (sus marcas de estilo y el lenguaje rural), la anécdota y su contexto temporal.

Conviviendo con lo anterior, la puesta en escena atraviesa lo contemporáneo a partir un registro actoral más próximo y una escenoplástica (espacio escénico, vestuario e iluminación) austera y metafórica donde el cuerpo del actor, la palabra y la intensidad emocional ganan protagonismo.