Tulumba: finalizó el Taller para Aplicaciones de Lana

En el marco del programa denominado Madres de Nuestra Tierra, del Programa de Desarrollo de Áreas Rurales (Prodear), el miércoles culminó el Taller de Nuevas Aplicaciones para la Fibra de Lana, que se desarrolló en las instalaciones del Centro Integrador Comunitario de San José de la Dormida, departamento Tulumba.

En la actividad se capacitaron 15 productoras y 3 productores rurales de la mencionada localidad, de Las Arrias y de Cerro Colorado. Se trata de emprendedores, artesanos y responsables de pequeños establecimientos de ovinos que trabajan con la materia prima de la región.

El taller tuvo sus dos primeros encuentros los días 28 y 29 de noviembre, en el horario de 14 a 20, y durante ambas jornadas las propuestas estuvieron dirigidas a lograr la comprensión general de la cadena productiva lanera de pequeña escala. También se analizaron las proyecciones de posibles intervenciones para mejorar las condiciones productivas locales.

Entre otras actividades, se explicó la técnica del afieltrado de lana en paños de dos dimensiones y en objetos de tres dimensiones sin costuras, además del proceso para la elaboración de cuencos de fieltro utilizando globos inflados como molde. Se brindó una presentación sobre hilatura manual artesanal y una disertación sobre la morfología aplicada al diseño de productos, entre otros temas.

El tercer y último encuentro del miércoles pasado, se programó con el objetivo de poner en común las experiencias de trabajo con las técnicas aprendidas, y mostrar los objetos elaborados.

Las técnicas. A cada asistente se le entregó todos los materiales necesarios (cortes de goma eva, pluriball, lanas, etc.). Para el proceso del afieltrado de lana en paños de dos dimensiones, la técnica consiste en ir colocando las fibras de lana lavada sobre un plástico y aplicar agua caliente y jabón con un rociador. A continuación se ejerce presión con las manos, se coloca lana nuevamente y se repite la operación varias veces.

Una vez que las fibras se encuentran lo suficientemente unidas se amasa el paño con un palo, luego se enrolla el paño en el plástico y en un trapo de algodón, se lo ata con cordones y se lo amasa ejerciendo presión con los antebrazos.

Este tipo de técnicas se constituyen como importantes herramientas de conocimiento para que los productores ovinos, sobre todo la mujer rural, agreguen valor a la materia prima. A través de este proceso, y al de afieltrado en objetos de tres dimensiones, se pueden elaborar distintos productos como sombreros, bolsos, botas o fundas, que posteriormente pueden comercializar.