Julián López cerró las jornadas de Buenas Prácticas en Río Cuarto

Hoy se llevó a cabo la ciudad de Río Cuarto la Jornada de Buenas Prácticas de Fitosanitarios, organizada por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentos, la Sociedad Rural local y el INTA. El evento se realizó en las instalaciones del Aeroclub, y en el cierre estuvo presente el titular de la cartera productiva provincial, Julián López.

Las actividades comenzaron a las 8.30 con la recepción de los 350 asistentes, que colmaron el salón principal. Luego se desarrolló una demostración a campo de pulverización aérea y otra terrestre, para posteriormente continuar con el denominado Módulo de Salud.

De esta instancia, participaron con presentaciones la doctora Nilda Gait, especialista en toxicología del Ministerio de Salud, y el doctor Martín Alonso, del Hospital Oncológico Córdoba. También habló la doctora Susana García, del departamento de Toxicología dependiente del Ministerio de Salud de la Nación.

A las 11 fue el turno del panel de intendentes, del que fueron parte los jefes comunales de Corralito y de Colonia Almada, Juan Carlos Scotto y José Peralta, respectivamente. Explicaron cómo fue su experiencia en materia de tratamiento de pulverizaciones en cercanías de los ejidos urbanos de sus localidades.

Finalmente y luego de un bloque de preguntas y debate, el cierre estuvo a cargo del ministro Julián López. “Hay que cambiar miedo por conocimiento, y trabajar con datos científicos y pruebas concretas, que es la única manera de salvaguardar la salud de los operarios y de la población. Desde el ministerio nos esforzamos por potenciar un modelo productivo sustentable y con cuidado de los recursos, y este tipo de encuentros ayuda a ese objetivo”, expresó el funcionario.

Bioeléctrica. Luego de finalizada la jornada de BPA, López, acompañado por el secretario de Agricultura y parte de su equipo técnico, recorrieron la planta de generación de energía Bioeléctrica. Esta planta, que requirió de una inversión de más de 6 millones de dólares, tiene como finalidad la producción de energía eléctrica a través de la utilización de biogás.

El biogás, a su vez, se obtiene a partir de una digestión anaeróbica de silaje de maíz con desechos pecuarios, y los subproductos que se obtienen de este proceso son biofertilizantes y energía térmica en forma de agua caliente.