El Ministerio de Salud, a través de la Dirección de Maternidad e Infancia, presentó formalmente hoy el plan de contingencia para infecciones respiratorias agudas bajas (IRAB) en niños y niñas de 0 a 5 años. Las IRAB son la primera causa de consulta de niños menores de 2 años (60 por ciento), constituyen más del 40 por ciento de las internaciones en los meses invernales y aumentan fuertemente la demanda de consultas e internaciones en el sistema de salud.
Este plan, que se sostiene en cada temporada invernal desde el año 2002, incluye estrategias para optimizar y ampliar el acceso de la población pediátrica al sistema sanitario. Los objetivos principales son reducir las muertes específicas por IRAB en niños -lo que contribuye a reducir la mortalidad infantil- y disminuir la incidencia de internaciones, complicaciones y secuelas por esta causa.
Al respecto, el ministro de Salud, Francisco Fortuna, recordó: «En la provincia de Córdoba hemos cumplido con los Objetivos de Desarrollo del Milenio en lo que respecta a la baja de la mortalidad infantil, y las IRAB ya no figuran desde hace varios años entre las 10 principales causas de muerte en niños menores de 1 año».
Este año, el plan de contingencia para IRAB incluye una inversión en equipamiento de 5.200.000 pesos y la incorporación de 150 profesionales. La distribución de los profesionales es la siguiente: 109 corresponden a hospitales de Capital (de Niños, Pediátrico, Materno Neonatal, Maternidad Provincial, Misericordia, Florencio Díaz), cinco médicos para los Centros de Atención Primaria de la Salud (CAPS), dos profesionales para el Laboratorio y 40 corresponden al interior.
En lo que respecta a internación, se cuenta este año con 321 camas críticas pediátricas y neonatales, lo cual representa un 11 por ciento más que el año pasado (eran 288). «Esto significa un salto de calidad muy importante en la capacidad operativa del sistema; tengamos en cuenta que partimos de 106 camas en 2014. El esfuerzo que se ha sostenido e incrementado cada año», expresó Fortuna. Asimismo, se cuenta con 209 unidades de internación pediátrica básicas en Capital y 280 en el interior.
Además, como en las contingencias anteriores, se provee de insumos y medicamentos para los hospitales provinciales; se refuerza la vigilancia y monitoreo epidemiológico en todos los niveles de atención; y se distribuye material informativo, tanto para la comunidad como para los equipos de salud. También se ajusta la organización del sistema de referencia y contra-referencia, sobre todo al alta de una internación en cama crítica.
Cabe aclarar que -aunque el plan se presentó formalmente hoy- las reuniones de la sala de situación, en las que se evalúa la contingencia, comenzaron la semana pasada y el sistema ya se encuentra dando respuesta a la demanda. El plan se implementará, en principio, hasta el 10 de agosto, con la posibilidad de extenderlo de acuerdo a la evaluación de los indicadores epidemiológicos y de la demanda de atención que se hace semanalmente.
Durante la presentación, la directora de Maternidad e Infancia expuso las cifras de la situación de las enfermedades respiratorias de los niños y valoró la disminución en la mortalidad por esta causa, tanto en el país como en la provincia. Al respecto, precisó: «Córdoba es la segunda provincia con menor riesgo de muerte por enfermedad respiratoria en los primeros cinco años de vida y la tasa de mortalidad por esta causa es tres veces menor a la media nacional».
Recomendaciones para la población
Las infecciones del sistema respiratorio son la razón más frecuente de enfermedad durante los primeros años de vida. La mayoría corresponde a episodios de las vías respiratorias superiores que no revisten gravedad, pero las infecciones en vías respiratorias inferiores pueden ser graves. Para el sistema de salud, el desafío es identificar esos casos con mayor riesgo de complicaciones.
En el caso de las familias, es importante recordar que en los niños menores de cinco años, la tos o el resfrío pueden convertirse en bronquiolitis o neumonía y, por eso, es fundamental prestar atención a esos síntomas, así como también al dolor de garganta, la congestión nasal y la fiebre. Los signos de alerta ante los cuales hay que concurrir inmediatamente al centro de salud son: respiración agitada o con ruidos, pecho hundido, irritabilidad, y el rechazo de alimentos y líquidos.
Algunas medidas de prevención para implementar en casa son:
-Controlar que los niños y niñas tengan todas las vacunas.
-Evitar que estén con personas enfermas.
-Amamantar a los bebés hasta los 6 meses y continuar la lactancia hasta los 2 años, aunque ya coman otros alimentos.
-Cuidarlos del frío.
-Limpiar y ventilar el hogar todos los días, preferentemente con trapo húmedo para no levantar polvillo.
-No fumar adentro de los hogares.
-No usar estufas, braseros ni cocinas a leña en el lugar donde duermen los niños y niñas.