Alcoholemia cero: avanza el debate en escuelas secundarias

Jóvenes de los últimos cursos de escuelas secundarias del interior provincial continuaron ayer con los encuentros enmarcados en las actividades de concientización del programa Alcoholemia Cero y la promoción de cultura del entretenimiento sin excesos.

La actividad es impulsada por el secretario de Asuntos Institucionales del  Ministerio de Gobierno y Seguridad, Osvaldo Vottero y el presidente de la Fundación Laura Cristina Ambrosio Batisttel “Estrellas Amarillas”, Julio Ambrosio.

Tanto en Corralito como en Pampayasta Norte, los disertantes coincidieron en destacar lo importante que es para los chicos saber reconocer que el entretenimiento no tiene que estar ligado a los excesos y que deben tener en claro que el que maneja no toma y el que toma no está habilitado para conducir ningún tipo de vehículo.

“Este es uno de los temas más importantes que debemos atender por estos días, convencidos que el principal capital que tiene un pueblo es la gente. En este marco, encontramos dos flagelos que tienen un hilo concurrente: la cultura de la diversión ligada con los excesos (alcohol y otros tipos de drogas no lícitas) y las 9.500 víctimas que hay en la Argentina por año a partir de los choques que se producen en rutas y calles de nuestras ciudades”, asintió Vottero.

El funcionario dio detalles de las tareas de concientización que se vienen realizando desde hace más de un año, alcanzando hasta el momento a unos 35.000 jóvenes de 104 localidades cordobesas y si bien reconoció que los estudiantes saben las reglas básicas de la educación vial y los abusos que se cometen en la búsqueda de diversión, insistió que a este tipo de temas hay que ponerlos en discusión de manera permanente.

En este sentido, apuntó más a fondo del problema instando a reconocer que “en los últimos años en nuestro país la familia ha colapsado; descuidamos a nuestros jóvenes y a nuestros niños que requieren contención a través de los valores que le puedan brindar sus padres. Esto hay que debatirlo, discutirlo en sociedad; esto no puede seguir pasando, es necesario revalorizar a la familia como eje y célula fundamental de la sociedad”.