Apross: controles ginecológicos crecieron un 10%

Un relevamiento reciente de Apross indicó que en los últimos dos años y medio un 10,3 por ciento más de afiliadas asistieron al ginecólogo y se realizaron estudios de papanicolau (PAP) y colposcopía. Los datos surgen de la comparación entre el número de consultas registradas, de enero a julio, durante 2010, 2011 y lo que va de 2012.

Cada año miles las mujeres argentinas  son diagnosticadas con pronóstico de cáncer de útero o de mama. Y el cáncer de cuello uterino es una de la mayor causa de muerte femenina en el país a partir de los 35 años.

De ahí que el Apross siga insistiendo en la necesidad de promover los controles ginecológicos anuales, muy importantes a lo hora de prevenir y detectar estas enfermedades.

Al respecto,  el especialista en ginecología y obstetricia Jorge Toledo explicó: “Las mujeres deben realizarse estudios ginecológicos cuando comienzan la vida sexual. Es decir, si una mujer a los catorce años tiene relaciones debe ir a su ginecólogo”.

“Los controles anuales permiten la detección temprana de lesiones como HPV, cáncer de útero, entre otros”, advirtió el médico, prestador de Apross.

En este marco, se recomienda efectuar un control ginecológico al año para detectar posibles alteraciones como el cáncer ginecológico, enfermedades inflamatorias y a partir de los 40 años, también se debe realizar una mamografía anual.

Qué estudios  realizarse

PAP: Mediante este estudio se pueden observar y analizar las células del cuello uterino y detectar los cambios que se producen en ellas y que pueden llevar al cáncer.

Colposcopía. Es la observación del cuello uterino y paredes vaginales.

Mamografía: Se pueden mostrar lesiones no palpables.