Actividades por el Día Mundial de las hepatitis virales

El 28 de julio es el Día Mundial de la Hepatitis. En adhesión, desde el Ministerio de Salud de la Provincia se organizan una serie de actividades centradas en la prevención, que tendrán lugar en la Plaza San Martín.

Desde hoy y hasta el jueves 30 de julio, de 10 a 16, se llevarán a cabo un conjunto de propuestas orientadas a la sensibilización de la población: difusión de información sobre hepatitis virales y vacunación para Hepatitis B.

Esta iniciativa es organizada por el Programa de Hepatitis Virales que integra el Programa de Lucha contra el Sida e ITS de Córdoba, en forma conjunta con la Secretaría de Salud de la Municipalidad de Córdoba.

¿Qué son las hepatitis virales? 

“Hepatitis” significa inflamación del hígado. El hígado es un órgano vital que procesa los nutrientes, ejerce una función desintoxicante y sintetiza proteínas. Cuando el hígado está inflamado o dañado, su función puede verse afectada.

En la mayoría de los casos, la hepatitis es provocada por un virus. Las hepatitis virales son causadas más frecuentemente por los virus de hepatitis A, hepatitis B y hepatitis C.

La Hepatitis A se transmite por el contacto con agua, alimentos u objetos contaminados con materia fecal.

La hepatitis B y la hepatitis C se transmiten por el contacto con sangre, por vía sexual o al compartir agujas, jeringas o elementos cortopunzantes. También puede haber transmisión de la mamá infectada al bebé durante el embarazo y/o parto.

La Hepatitis B y C pueden evolucionar en formas crónicas y pueden causar enfermedades en el hígado como la cirrosis, insuficiencia hepática o cáncer de hígado.

¿Cómo se previenen?

Una forma efectiva de prevenir la hepatitis A es la implementación de medidas higiénicas como lavarse las manos después de ir al baño, cambiar los pañales y antes de preparar alimentos. Además se recomienda cocinar bien los alimentos y consumir agua hervida o purificada. También son importantes las condiciones ambientales como una correcta eliminación de excretas.

Para prevenir las hepatitis B y C, las principales medidas de prevención son el uso correcto y continuo del preservativo en todas las prácticas sexuales; y no compartir agujas o elementos corto-punzantes. Además, debe exigirse el uso de materiales descartables o esterilizados al hacerse tatuajes, piercings o implantes. Por último, las mujeres embarazadas deben solicitar a su médico que le realicen el test para detectar hepatitis y otras ITS a fin de que tomar los recaudos necesarios para evitar la transmisión al bebé.

La hepatitis A y la hepatitis B pueden prevenirse a través de sus respectivas vacunas, incluidas en el calendario oficial de vacunación. La vacuna de la hepatitis A se aplica, en una única dosis, a los 12 meses de vida o a niños que nacieron a partir de 2005 (en el caso de no haberla recibido al año). La vacuna de la Hepatitis B se aplica una dosis al recién nacido dentro de las 12 horas de vida y luego como parte de la vacuna quíntuple celular o pentavalente a los 2-4- y 6 meses de vida. También se incorporó al Calendario para todos los adultos.