En el marco de la conmemoración del “Día mundial contra la Trata de Personas”, y a un año de su asunción como secretaria de Asistencia y Prevención de la Trata de Personas, Patricia Messio destacó las acciones llevadas a cabo desde el Gobierno provincial para dar pelea a este flagelo social que golpea a los sectores más vulnerables de la sociedad.
– ¿Cuál es el balance de su primer año de gestión?
– Este ha sido un año de muchos desafíos para poder concientizar y hacer efectiva la responsabilidad estatal respecto a esta problemática. Hemos sido un obstáculo a la corrupción, porque en este tipo de delitos existe una estructura de corrupción. Hemos trabajado de manera mancomunada con otros organismos, fuerzas policiales y la justicia, lo que ha permitido tener una pelea firme y efectiva contra el flagelo de la trata de personas, que no se limita solamente a la explotación sexual, sino que también abarca otro tipo de situación como la explotación laboral, el tráfico de órganos, etc. La que asumimos es una tarea que exige mucha dedicación y esfuerzo, y de enorme responsabilidad por la vulnerabilidad de las personas que son víctimas, pero con resultados positivos que te llenan de satisfacciones, porque realmente se puede ayudar a las víctimas a salir adelante.
– ¿Cuáles son los desafíos de cara al futuro?
– Por lo pronto, establecer una transversal conceptual. Es decir, poder acordar determinados aspectos que hagan que un delito transnacional como el de la trata de personas tenga un abordaje en el que lo que realmente importe sea la persona. Córdoba es pionera en la lucha contra la trata de personas y debemos mantener esta política firme que ha caracterizado al Gobierno provincial en esta materia.
– ¿La sociedad está tomando mayor consciencia respecto a la trata de personas? ¿la gente se anima a denunciar?
– La sociedad va tomando mayor conciencia. Lo digo porque aquí en la Secretaría recibimos cientos de consultas, lo que nos ha permitido intervenir a tiempo en casos que podrían haber sido fatales. Muchas veces, gracias al aviso de un familiar o un amigo, hemos podido evitar que una persona se pierda en una red de trata, de la que quizás nunca más podría haber salido. Por eso, siempre insisto en que la vulnerabilidad de las víctimas de trata es social, es económica, es cultural, pero fundamentalmente es afectiva. Esto no es solo un tema de estratificación económica, por lo que no tenemos que quedarnos tranquilos solamente porque le damos a nuestros hijos un buen pasar. Se trata de de estar muy atentos y escuchar para no quedar atrapados en la vorágine de los logros inmediatos, que muchas veces se traducen en falsas promesas que hacen que uno pueda caer en una red de trata.
– ¿De qué manera se asiste a las víctimas de trata rescatadas?
– Un equipo conformado por abogados, psicólogos y asistentes sociales asiste a las víctimas desde un abordaje interdisciplinario. Lo primero es ayudarlas a recuperar su dignidad y luego prepararlas para su reinserción social y laboral, a través de la capacitación y asesoramiento para, por ejemplo, comenzar un emprendimiento. Lo más importante es que nunca las dejamos solas, vamos acompañando su evolución paso a paso.
– En este primer año de gestión, ¿cuáles han sido los hechos más destacados?
– Lo más importante es haber podido comunicar cuáles eran nuestros objetivos en el abordaje de la problemática de la trata de personas. Estamos convencidos de la importancia de un Estado absolutamente presente en este tema, por lo que estamos siempre abocados en poder contener a las víctimas, ser el primer contacto con ellas y acompañarlas en todo el proceso.