Recorrer la historia sobre el antiguo Camino Real

El antiguo Camino Real unía el Virreinato del Río de la Plata con el Alto Perú. Con más de 3.000 kilómetros de extensión, aquel trazado era la principal vía de transporte, comercio y comunicación entre las ciudades de Buenos Aires y Lima.

En épocas de la colonia, las expediciones españolas bajaban del Alto Perú conquistando pueblos y fundando ciudades. Tal es el caso de Jerónimo Luis de Cabrera, que llegó hasta la vera del río Suquía y fundó la ciudad de Córdoba el 6 de julio de 1573.

Como él, funcionarios de la corona española, gobernadores, virreyes y autoridades eclesiásticas transitaron por este corredor de vital importancia para el desarrollo del norte cordobés, al igual que las órdenes religiosas de franciscanos, domínicos y mercedarios que llevaron su credo a cada poblado.

Ejemplo de ello fueron los jesuitas, que concibieron un ambicioso proyecto social, educativo, cultural y religioso puesto en marcha a través de las estancias que se encontraban en cercanías al antiguo Camino Real. Por aquel entonces, estas imponentes construcciones y las postas brindaban alojamiento y comida a los viajeros: comerciantes, arrieros y troperos que llegaban en mula, a caballo, en carretas, hacían el recambio en estos sitios que hoy revisten un valor patrimonial histórico.

Ya en los años cercanos a la Independencia, por el Camino Real pasaron los ejércitos de Belgrano y San Martín en su lucha contra los realistas. Más tarde, durante el proceso de organización nacional, unitarios y federales libraron duras batallas internas en pos de un proyecto de país centralista o federal.

Senderos de tierra y parajes agrestes fueron el escenario natural de acontecimientos trascendentes como el asesinato de los caudillos Juan Facundo Quiroga y Francisco Ramírez, entre otros.

Tras los pasos de la historia

En 2010, con motivo del Bicentenario de la Revolución de Mayo, a través de la ley provincial 9.883 se aprobó el proyecto de puesta en valor del antiguo Camino Real en el norte de Córdoba.

Se revalorizaron sitios históricos como postas, casonas y estancias en un itinerario cultural que comienza en la localidad de Colonia Caroya, a 50 kilómetros de la Capital, hasta el límite con la provincia de Santiago del Estero. Allí un lugar estratégico para obtener información útil de los distintos sitios históricos es el Centro de Interpretación del Camino Real.

Centro de Interpretación del Camino Real

 

Dirección: 28 de julio 365.

Días y horarios en vacaciones de invierno: de lunes a domingo, de 10 a 18 horas.

Días y horarios durante el año: de martes a viernes, de 10 a 18 horas. Sábados, domingos y feriados de 9.30 a 13.30 y de 15 a 18 horas.  

 

 

Estancia Jesuítica de Caroya

Después de visitar el Centro de Interpretación del Camino Real, el recorrido continúa por la Estancia Jesuítica de Caroya, creada en 1616 y dedicada a la producción de maíz y trigo, frutas, vino, miel y algarrobo, para el sostenimiento de la orden jesuítica. Se trata de la más antigua de los seis conjuntos arquitectónicos que fueron declaradas por UNESCO Patrimonio de la Humanidad en 2000.

Durante la guerra de la Independencia, en ese lugar funcionó la primera fábrica de armas blancas para el Ejército del Norte y se confeccionó la espada del general José Gervasio Artigas. Luego pasó a manos del Gobierno nacional y en 1876 el presidente Nicolás Avellaneda dispuso que fuera el lugar de alojamiento de los inmigrantes provenientes de la región de Friuli (Italia), que se establecieron en esa región del norte y hoy le otorgan su identidad.

Dirección: 28 de julio 365.

Días y horarios: de martes a viernes, de 8 a 18 horas. Sábados, domingos y feriados de 9 a 15 horas.

Entrada general: $50.

Entrada gratuita para estudiantes, jubilados y menores de 18 años.

Teléfono: 03525 – 428581

Se ofrecen visitas guiadas.

Estancia Jesuítica de Jesús María

Otra parada obligada es la Estancia Jesuítica de Jesús María, símbolo de la obra evangelizadora, cultural y educativa que tuvo la Orden de la Compañía de Jesús en Córdoba y que sostenía al igual que las demás, la obra de los jesuitas.

Ubicada a 200 metros del Anfiteatro José Hernández, se compone de la casa, la iglesia y la bodega, convertidas hoy en Museo Jesuítico Nacional. La construcción se destaca por su patio central con galerías y corredores con bóveda de cañón corrido, muros anchos, tejas y vigas de madera.

Dirección: Pedro de Oñate s/n.

Días y horarios: de martes a viernes de 8 a 19 horas. Sábados, domingos y feriados de 10 a 18 horas.

En vacaciones de invierno: lunes 8,15 y 22 de julio de 8 a 19 horas.

Teléfono: 03525–420126

Se ofrecen visitas guiadas con entrada gratuita.

 

Posta de Sinsacate

Está ubicada a cuatro kilómetros de la Estancia de Jesús María. Adquirió ese nombre en 1748 con la creación del servicio regular de correos, siendo la más importante en el territorio cordobés.

También es conocida con el nombre de “Posta de la Patria” por ser uno de los sitios por donde pasaron los ejércitos de San Martín y Belgrano, del general José María Paz y los conducidos por Juan José Castelli, Hipólito Vieytes y Francisco Ortiz de Ocampo.

Tal vez el hito más importante de este sitio fue haber sido el lugar donde se velaron los restos de Juan Facundo Quiroga, asesinado el 16 de febrero de 1835 por una partida a cargo de Santos Pérez bajo las órdenes de los hermanos Reynafé, en Barranca Yaco. En este paraje se alza el monumento en homenaje al caudillo riojano y en la posta, cada febrero se llevan a cabo distintas actividades alusivas que permiten revivir y vibrar con una parte de la historia.

Dirección: Camino Real s/n.

Días y horarios: de martes a viernes, de 8 a 19 horas.Sábados, domingos y feriados de 14 a 18 horas

Vacaciones de invierno: lunes 8,15 y 22 de julio, de 8 a 19 horas.

Teléfono: 03525– 402240

Se ofrecen visitas guiadas con entrada gratuita.