Como si se tratara de un desfile, desde las 9.00 camionetas y camiones llegan al Mercado de Abasto y comienza el ritual de descarga y empaquetamiento de los productos que llegan del cinturón verde de la ciudad. Cinco horas después los puesteros inician la venta. La actividad es incesante y el flujo de personas también. En la escuela que allí funciona pasa lo mismo.
Después de largas gestiones iniciadas por la Cooperativa de Trabajo El Abasto Córdoba, que agrupa a trabajadores conocidos como changarines y los puesteros, comenzó a funcionar a finales de junio de 2011 un servicio educativo secundario para adultos con modalidad semi presencial.
httpv://www.youtube.com/watch?v=lOhtTe3GwlE&feature=plcp
Los martes y jueves por la mañana, alrededor de 60 alumnos tiene la posibilidad de asistir a clases tutoriales, de consulta e intercambio de conocimientos entre compañeros. Esta opción permite a todos los trabajadores, comenzar y concluir el secundario en la sede del mercado.
El servicio educativo es Dependiente del Centro Educativo de Nivel Medio Adultos (CENMA) 19 Bicentenario de barrio Pueyrredón, y les ofrece a los alumnos una orientación en microemprendimientos que les brinda herramientas para futuros proyectos laborales.
Miguel Ángel Cabrera, presidente de la Cooperativa El Abasto Córdoba Limitada, comentó que luego de aplicar un programa de alfabetización vieron la necesidad de contar con el secundario. “Queremos que los changarines crezcan, que tengan otras posibilidades. La escuela les puede cambiar la vida”, aseguró.
Desde la cooperativa afirman que este centro educativo está abierto a todas las personas que decidan retomar sus estudios, porque entienden que la educación es un derecho fundamental para garantizar las condiciones básicas para la formación y el desarrollo de los trabajadores a nivel individual y colectivo.
Carlos Brenne, director de Educación de Jóvenes y Adultos del ministerio de Educación, explicó que el sistema semi presencial permite el ingreso de alumnos en cualquier momento del año, ya que está estructurado en módulos de estudios. Esta flexibilidad en el dictado de los contenidos, permite que las escuelas de adultos se adecuen a las necesidades de la gente.
“Es una experiencia muy linda y novedosa. Es una iniciativa de los changarines que hacia años, a través de las cooperativas, venían bregando por contar con una escuela que se adapte a su trabajo, que es muy arduo y con horarios muy inconvenientes”, manifestó el funcionario.
Una de las características de la educación de jóvenes y Adultos es la de abrir servicios educativos donde surja la necesidad y la demanda. Esto ha dado buenos resultados con la reubicación de muchos servicios educativos que una vez satisfecho su requerimiento, se trasladan hacia donde la comunidad los necesite. También, el formato de educación semi presencial a distancia permite regular el tema horarios y también el contexto en el cual se trabaja.
José Luis (46 años), uno de los tantos vendedores del mercado, quiere terminar sus estudios. Contó que no había tenido la posibilidad de “hacer la secundaria” y que ahora ir a clases en su lugar de trabajo es algo único que “generó un avance y un beneficio para mucha gente”. Por su parte, Orlando (37 años), changarín, confió: “Retomar los estudios para mi fue bárbaro porque uno tiene familia, trabajo y va postergando el estudio y más con los horarios del mercado. Es una felicidad enorme que además nos posibilita aportar nuestro granito de arena para construir una sociedad mejor”.
Para el ministro de Educación, Walter Grahovac, la instalación de la escuela en el Mercado de Abasto fue posible por el trabajo en conjunto de la cooperativa El Abasto, la municipalidad que cedió el lugar y el Estado provincial que puso los recursos humanos y los módulos de estudio.
“Esta es una de las experiencias mas lindas y queridas porque por allí nos parece que aquel que trabaja de changarín no tiene otra posibilidad en la vida y esto nos demuestra que cuando hay voluntad, deseo, ganas y un Estado atento a la demanda las cosas pueden funcionar”, expresó Grahovac.
Además de la cooperativa El Abasto, que fue la que tomó la iniciativa, también brindaron su apoyo la Cámara de Operadores Fruti hortícolas de Córdoba, las cooperativas de trabajo Mercoop, Mercor y Ramón Navarro y la Asociación de Productores hortícolas de Córdoba.
“Que vengan ellos, sus padres y todos aquellos que lo necesiten para que sus hijos vean que se quieren superar y sean su ejemplo. Nuestra expectativa es que esta iniciativa tenga continuidad en el tiempo y que la escuela sea vista acá en el mercado como un vehiculo a una nueva salida laboral, incluso una puerta a la universidad ”, anhela Cabrera.