Comenzó en Saldán la filmación de la película «Yo, traidor»

En una señorial y antigua casona de Saldán se está rodando «Yo, traidor», la película de Rodrigo Fernández Engler que protagoniza Mariano Martínez. Puertas adentro, el director de Fotografía, Daniel Arroyo, acomoda la cámara para un plano corto del actor mientras en el parque crece el trajín de técnicos y asistentes. En ese clima de  intenso trabajo Jorge Álvarez, titular del Polo Audiovisual Córdoba, celebra el comienzo de un nuevo proyecto y asegura que tiene implicancias artísticas y laborales.

«El Gobierno de Córdoba apuesta por un proyecto de director, productor y guionista cordobés; invierte recursos y luego ya tiene inversión de Norteamérica para complementar el financiamiento», asegura después de detallar que  tras la filmación en Saldán, se trasladarán al sur patagónico y finalmente a los Estados Unidos, a la Universidad de Oklahoma donde está previsto un trabajo que insumirá unos diez días.

Mariano Martínez se toma un descanso para explicar de qué se trata «Yo, traidor» y dice que está referida a las segundas oportunidades. «Habla básicamente de eso; habla del amor y plantea que todos nos podemos equivocar o  que todos nos equivocamos en algún momento de la vida, y también del arrepentimiento y del perdón».

Contento con el entorno y con el entusiasmo de sus compañeros y el equipo de producción, dice que está seguro de  que saldrá algo bueno.

«Es una película que me encanta, que estoy  feliz de estar haciendolo con un equipo maravilloso de gente de acá de Córdoba, brillante, de talento, que trabaja con amor y con esa conciencia de que todos somos importantes en la película».

Y en cuanto a su labor, Mariano revela que su rol es el de Máximo que es quién se equivoca y tiene después esa segunda oportunidad. «Está basada, en  la Parábola del Hijo Pródigo, es una versión libre de ese texto de la Biblia».  La película transita por sus primeros días de filmación y en opinión del actor «viene saliendo brillante y ojalá siga así porque estamos todos muy ilusionados y tenemos la convicción de que estamos haciendo una gran película».

Mariano dice también que le gusta mucho filmar fuera de Buenos Aires aunque extraña algo a su familia, porque su mujer lo iba a acompañar pero una propuesta laboral la retuvo en Capital Federal. «Me siento cómodo, querido, acompañado y parte de este equipo que me parece fundamental para cualquier proyecto». Y agrega «son todos unos maestros, aprendo muchísimo de cada uno de ellos. Aparte, agradezco estar trabajando acá, entre las sierras, en un lugar que es mágico, que te da una energía que no se puede explicar».

Finalmente, el protagonista de «Yo, traidor» habla de la importancia del Polo Audiovisual. «Es importante para todo el país que exista un organismo que apoya al cine nacional. Lo necesitamos y, de corazón, espero que sigan así».

Contar historias para la gente

Detrás de la idea, en el guión y en la dirección de «Yo, traidor», está Rodrigo Fernández Engler, un realizador joven que describe sencillamente su ideario cinematográfico con un puñado de palabras. » Yo creo en el cine para la gente, en contar un cuento, en contar una historia para todo público».

Conmovido como un padre que es testigo de los primeros pasos de un hijo, afirma que la película va a conmover a la gente. «‘Yo, traidor’ es una película de segundas oportunidades; una historia de amor entre un padre y un hijo, muy conmovedora y muy linda, que conjuga acción, drama, suspenso».

Tras apuntar que se trata de una coproducción con Estados Unidos, recuerda que «primeramente, tenemos el apoyo del Polo Audiovisual de la Provincia de Córdoba a través del programa de incentivos  que realmente está buenísimo y eso nos permite financiar una gran parte del filme».

Concluida la etapa de rodaje en Saldán, «vamos a estar grabando también en la Patagonia, en Puerto Rawson y  finalmente vienen diez días en Estados Unidos porque hay una Universidad, en Oklahoma, que se suma a la película y hace de coproductora, con un actor norteamericano».

Fernández Engler, que debutó en las lides de la dirección con «Soldado argentino, sólo conocido por Dios«, trabajó en el guión y en cada uno de los detalles que permitieron materializar este nuevo proyecto. Admite que participó  también en la elección del elenco que mezcla a actores de Córdoba y Buenos Aires. Además de Mariano Martínez, en el reparto figuran Jorge Marrale, Arturo Puig, Osvaldo Santoro, Francisco Cataldi, Fanny Cittadini, Mercedes Lambre y Sergio Surraco.

No le gusta demasiado que le planteen si a la hora de imaginarse la película pensó en un desfile por distintos festivales nacionales y en el exterior, o en salas repletas. Tras aclarar que su favorita es «La lista de Schindler» de Steven Spielberg, insiste en que cree en el cine para la gente.

«Y estamos aportando también a esto que está haciendo Córdoba, que es el cine como industria; por eso es tan importante lo que está haciendo el Polo Audiovisual de Córdoba, que es darle este viso de industria a nuestro cine para que el cine que se produce en Córdoba se vea en el resto del país y en otros países también, como sucederá con esta película», apunta Fernández Engler.

Celebra Rodrigo el clima de trabajo, los sueños y las expectativas. «Estamos trabajando con un hermoso grupo de personas; no solamente los actores, sino todo el equipo técnico que es de la ciudad de Córdoba. Aquí tenemos los proveedores, cámaras, luces, gastronomía y todo lo que necesitamos para contar un lindo cuento».