El Nuevo Plan de Pagos para Regularización de Deudas Impositivas lanzado por la Provincia de Córdoba, a través del Decreto N°457, a diez días de su plazo de vigencia, muestra números elocuentes y confirma el propósito inicial de agregar un instrumento para avanzar con la conformación y regularización de deudas con el fisco provincial.
A un mes de su lanzamiento, el monto total que se lleva “allanado” asciende a $121 millones. De este total, $94 millones corresponden a deudas que se encontraban en proceso administrativo y $27 millones en situación judicial.
El plan fue creado para “coadyuvar en forma concreta al sostenimiento de actores económicos que atraviesan momentos de fluctuación e incertidumbre, producto –entre otras causas– de las elevadas tasas de interés e inflación, a lo que se le suma una desaceleración de su tasa de crecimiento”, indica el decreto en sus fundamentos.
Respecto de los planes de pagos disponibles, el nuevo esquema tiene las siguientes particularidades:
1) Ampliación del número máximo de cuotas al que pueden acceder (120) para deuda judicial y/o que surjan de fiscalización.,
2) La misma tasa de interés de financiación del 1,50% mensual acumulativo que se aplica al resto de los planes de pago.
3) A diferencia de los otros planes de pago, se requiere un anticipo por una parte de la deuda.
4) Reducción al 50% de las multas no firmes impuestas por la Dirección de Policía Fiscal (DPF) hasta el 31 de mayo de 2019. No se trata de una moratoria.
El impacto positivo del plan sobre ese 77,6% de deudas en estadio administrativo que se logró regularizar es múltiple:
-Para los contribuyentes: se evita que entren en instancias judiciales que son costosas en términos de honorarios y trámites burocráticos, y se contribuye a resolver la vulnerabilidad que implicaban las deudas para su perfil fiscal, a costos relativamente accesibles en el marco de un contexto económico complicado.
-Para el Estado: la importancia no radica tanto en el monto en sí que se ingresa sino en el hecho de que ha permitido ordenar un stock de más de 600 casos fiscalizados, sobre los cuales el 80% se logró contactar para reencauzarlos en una instancia de cobro voluntario.
Con este Plan de Pagos, la Provincia suma esfuerzos a su estrategia global de “deflacionar costos impositivos” por la vía de la reducción consistente de Ingresos Brutos (tal como se comprometió en el Consenso Fiscal) y de crear condiciones de cumplimiento de las obligaciones impositivas, que no comprometan el giro de negocios de los agentes económicos. Cabe destacar que, entre 2017 y 2018, Córdoba se ubicó entre las dos jurisdicciones que más bajaron la incidencia de IIBB, situando a la Provincia entre las tres con menor presión fiscal en tributos provinciales.
Con este nuevo instrumento, la Provincia refuerza su compromiso con el objetivo de acompañar al pujante sector privado cordobés, en momentos en los que la situación económica demanda de esfuerzos compartidos para asegurar la cohesión social y garantizar la recuperación de la actividad.