Ayer a la tarde se realizó el primer encuentro organizado por la Agencia Córdoba Cultura, a través del Área de Música, en el Teatro Libertador San Martín. Gustavo Fontana, director de la Banda Sinfónica de la Provincia, tiene a su cargo las capacitaciones que se desarrollarán en 4 reuniones, las próximas son el 28 de agosto, 4 de septiembre y 23 de octubre.
En la capacitación, Fontana con maestría y solvencia fue lanzando diferentes conceptos que ayudan a reflexionar sobre el por qué y para qué de las bandas: “No sobrevaloro la técnica, hay que tenerla, pero la formación musical es mucho más que eso, es la comunicación que se establece con los otros músicos”.
Con este concepto, el director rompe con la imagen que se tenía antes de los directores, en donde se los consideraba “enviados celestiales”, dijo Fontana y agregó: “Para mí el director es parte de un equipo, que hace una propuesta y los músicos responden y depende de cómo funcione ese conjunto van a ser los resultados del trabajo».
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A propósito, el maestro explicó que “la técnica se la puede enseñar a un primate en 3 meses”. Con esta idea invitó a los alumnos a pensarse dentro de las bandas, sobre el rol que deben asumir.
Para ser un buen director de banda hay que tener cultura general, estar abierto y mirar lo que nos rodea: “El fanatismo es pernicioso para cualquier disciplina”, sostuvo Fontana e indicó: “No sirve aislarse porque te perdés varios capítulos”.
Cada una de las sesiones de capacitación comenzará en horas de la mañana, cuando se realizan los ensayos regulares de la Banda Sinfónica de la Provincia en el Teatro del Libertador General San Martín (TGSM).
El trompetista, interpeló a los músicos en cada tema que iba presentando. Para Fontana, el concepto de crecimiento no es apropiado, para el músico es mejor hablar de movimiento o nutrismo, ya que puede pensarse al desarrollo musical como algo elitista o una época mejor que otra y “esto no es así», sostiene el director.
Entre los contenidos que se tratarán, figuran: Herramientas básicas de la dirección; acercamiento al estudio de la partitura; comunicación y programación neurolingüística; y planificación de un proyectos de banda sustentable.
Fuerte presencia
De acuerdo al relevamiento de bandas sinfónicas que la Agencia Córdoba Cultura realizó en 2012, en la provincia existen 52 bandas infantiles-juveniles y unas 15 big bands, o grandes bandas de jazz. A través del programa «Vamos las bandas» se advirtió la necesidad del crecimiento y la necesidad de apoyo que tienen estas organizaciones musicales y la propuesta continúa, aseguran sus coordinadores, Ignacio García y Juan Sassatelli, además de las capacitaciones, tienen planificados ciclos de conciertos y concursos para arregladores y partituras.
Las bandas sinfónicas son en muchos casos un motivo de integración social para distintos pueblos y ciudades de la provincia, e incluso una seña de identidad que los representa. No sólo tienen la función de animar actos protocolares o desfiles, contribuyen a la integración y son un ámbito para la formación de músicos profesionales. Este semillero de músicos dio instrumentistas como Mariano Loiacono, nacido en la Banda de Cruz Alta, y Javier Girotto, oriundo de la Banda de Villa del Rosario.