Francia invita a disfrutar de Kaddish, un poema de amor

Arthur Nauzyciel es director, actor y dirige el Centro de Arte Dramático Nacional de Orléans en Francia. Hoy sábado, a partir de las 19 horas, intentará cautivar al público de Córdoba con una obra que es, en realidad, un poema cálido, profundo, desgarrador y universal porque habla del amor entre un hijo y su madre.

Se llama Kaddish y su autor es Allen Ginsberg, uno de los principales poetas de la “beat generation” junto con Jack Kerouac, Williams Borroughs y Gregory Corso.

Nauzyciel advierte que «no es verdaderamente una obra de teatro, no es tampoco un espectáculo, es algo que es más cercano a la lectura; es una manera de hacer escuchar la fuerza de este poema de Ginsberg».

Detrás de la creación del norteamericano hay una historia atractiva y dolorosa. «kaddish es un rezo-explica el actor francés-es el nombre del rezo de los muertos para los judíos, por eso es que no podemos teatralizar todo. Hay que mantener la dignidad y la distancia que implica una oración».

Los espectadores que concurran este sábado a las 19 a la Sala Mayor de la Ciudad de las Artes tendrán la ocasión de oír el poema en francés y podrán leer los subtítulos en español.

En Kaddish, Ginsberg cuenta de su infancia y adolescencia vivida con su madre, quien era una judía rusa, comunista, que llegó a los Estados Unidos en la década del 30 y que progresivamente fue volviéndose loca.

Toda la vida del que es uno de los máximos exponentes de la generación beat está marcada por esa  infancia y adolescencia al lado de esa madre devorada por la locura, a quien debía acompañar al hospital psiquiátrico, y que padeció electroshocks y lobotomías, dos procedimientos característicos de la época.

«Este poema, Kaddish,es  un rezo y  un homenaje póstumo a su madre muerta, pero a través de este rezo, él cuenta también la historia de su madre y la  de su relación con ella» se entusiasma Arthur Nauzyciel.

Para llegar al público del Festival Internacional de Teatro Mercosur 2015, el director francés confía en la universalidad del texto que ha elegido interpretar, así como en la riqueza de su autor.

«Ginsberg era un gran poeta. Era un hombre  provocador, muy politizado, con un perfil complejo.Era homosexual, tomó muchas drogas y escribió sobre su vida, sobre las drogas, sobre su sexualidad, y en contra del gobierno americano. Él  estaba del lado de los Panteras Negras, era alguien muy subversivo», enfatiza Nauzyciel.

A continuación se encarga de advertir que «quizás su dimensión muy política, muy subversiva, ha hecho olvidar que también fue un gran poeta y que ha revolucionado la escritura. Después de Ginsberg, -y también de  Kerouac y Borroughs – hemos escrito diferente».

El actor galo vuelve sobre las inmensas posibilidades de la obra y su capacidad de llegar al público de cualquier parte del mundo. «Es una historia profundamente íntima que puede conmover a todos porque habla del amor entre un hijo y su madre; incluso si su madre puede parecer un monstruo».

Y en cuanto a su contribución personal a Kaddish, dice que «hay una película hecha por una artista plástica, escritora y cineasta que se llama, Valérie Mréjen. En este film, ella filmó a mi madre que prepara un plato muy especial».

Respecto de la impresión que tiene de Córdoba, el francés dice que lo conmueve la mezcla de épocas y los edificios jesuitas. «Se ve como una parte de la historia de la Argentina comienza acá, y al mismo tiempo se advierte el desarrollo posterior».

Añade que le gustan mucho las ciudades del interior, la discreción y la calma que encuentra aquí y pondera también la amabilidad con la que ha sido tratado a su llegada al país.