​Archivo Histórico: un papel saludable

Un documento escrito en la lengua castellana que se usaba hace más de 300 años, en la lejana Córdoba colonial, con una grafía admirable sobre un papel hecho a base de trapo y escrito con tintas ferrogálicas -pigmento de origen vegetal utilizado entre el siglo V y entrado el siglo XX-, no es cualquier documento. Es la muestra palpable de un tiempo histórico y de una forma de la cultura escrita que ya no se practica.

El Archivo Histórico de la Provincia de Córdoba está dedicado a la digitalización de una considerable cantidad de documentos de alto valor histórico, para facilitar de esa forma su accesibilidad y a la vez preservarlos de agentes que pueden poner en riesgo su integridad. La digitalización es un proceso efectivo, que requiere algunas condiciones antes de pasar el original en papel a un archivo digital. La rehabilitación del documento se realiza para llevar el documento a un estado que permita hacer una toma digital que sea legible.

El cuerpo documental con el que se está trabajando suma 14.423 folios de la llamada serie Gobierno. Los documentos comprenden un período de tiempo que va de 1642 a 1810, es decir, que estos papeles dan cuenta de las acciones del Gobierno de Córdoba desde su conformación en el período colonial hasta la Revolución de Mayo.

Anteriormente, el archivo transformó en imágenes digitales expedientes judiciales del siglo XVI, incluido el primer expediente originado en 1574 por un vecino de aquella Córdoba de la Nueva Andalucía. También fueron procesados los censos provinciales del periodo 1778–1856. El mismo procedimiento se aplicó al fondo documental perteneciente al Hospital San Roque, entre los siglos XVII al XIX, y protocolos notariales del siglo XVI que contienen las primeras escrituras labradas en la ciudad.

El papel y su contorno

Andrea Giomi, conservadora que trabaja en el Archivo Histórico de la Provincia de Córdoba, revela que muchos de los papeles están hechos en base a trapo y escritos con tintas ferrogálicas. El clima de Córdoba es muy variable y estas variaciones en la temperatura y la humedad son las que facilitan el desarrollo de microorganismos, como hongos y bacterias, dependiendo de la salubridad ambiental.

Los nuevos depósitos del Archivo Histórico Provincial mantienen los niveles que impiden el desarrollo de agentes nocivos para el papel. Sin embargo, algunos documentos deben ser sanitizados por la existencia de esporas, corpúsculos que pueden aerotransportarse hacia otros papeles que se encuentran en buen estado de conservación.

Sanar las hojas

“Sanitizar un documento es poder eliminar todas las toxinas y microparticulas que el papel pueda tener y que pueden generar algún tipo de reacción para la salud de las personas, pero también para hacer una estabilización del material respecto de agentes que pueden producir deterioro en el soporte del documento”, comenta la conservadora Andrea Giomi.

La sanitización entones es el procedimiento por el cual se tiende a eliminar los microorganismos, como bacterias y hongos, que pueden expandirse en el aire a otros papeles.

En una paciente y minuciosa tarea, el proceso de sanitización se realiza hoja por hoja y comprende una limpieza en seco, que se hace mediante aspiradoras y barridos con pinceles, y una nebulización con productos que deshidratan al hongo; esto último se hace, básicamente, con el uso de alcohol etílico mezclado con agua. Luego hay que asegurarse que el material seque completamente para devolver el tomo al estante que ocupa dentro del depósito. Cabe señalar que algunos documentos poseen hongos desde antes de ser trasladado a la nueva sede del archivo, por eso es preciso tratarlos aún en un ambiente con las condiciones ambientales óptimas.

La consulta

La Sala de Consulta abre de lunes a jueves de 9 a 17 horas. El pedido de consulta de un documento de antigua data, histórico, debe realizarse por correo electrónico 48 horas antes, a la dirección archivo.historico@cba.gov.ar. Si el documento está digitalizado solamente su utiliza el soporte digital para preservar el original en papel.

Cuando el archivo recibe el pedido de consulta, el área de Conservación realiza un diagnóstico de los documentos solicitados y verifica su estado. Luego resuelve aprobar la manipulación directa del documento, no aprobar la consulta por razones de conservación, o aprobarla de manera asistida.

Memoria escrita

Recientemente, el Archivo Histórico de la Provincia de Córdoba recibió un importante acervo de documentos del Poder Ejecutivo  y Resoluciones de Hacienda, Obras Públicas, Educación, Salud, Consejo del Menor, y el Registro Oficial de Protocolo, entre otros papeles de la administración central, del período 1903 – 1974. La ley 3967 crea el Archivo Histórico de la Provincia y establece el ingreso de documentos, expedientes y fondos documentales de las dependencias de la Administración Pública Provincial de más de 40 años de antigüedad.

Páginas con historia

Puntualmente, el cuerpo documental que será fotografiado consiste en: expedientes judiciales del siglo XVI, incluido el primer expediente originado por la muerte de Blas de Rosales, uno de los primeros pobladores de la ciudad de Córdoba, en 1574; todos los censos provinciales que abarcan el periodo de 1778 a 1856, de gran interés para investigadores y especialistas de distintas ramas del conocimiento; el fondo documental perteneciente al Hospital San Roque, que registra su historia desde el siglo XVII al XIX; protocolos notariales del siglo XVI, que contienen las primeras escrituras labradas en Córdoba; entre otros documentos de gran valor histórico.

“Es importante destacar que la documentación está siendo tratada para lograr su estabilización, es decir, su preparación para la digitalización”, aclara la directora del Archivo Histórico Provincial, Gabriela Parra Garzón.

“Este tipo de tratamiento de preservación es indispensable para garantizar la obtención de imágenes digitales de excelente calidad, que permitan una óptima lectura del documento y de su materialidad”, asegura Gabriela Parra Garzón. “La documentación histórica muchas veces adolece de problemas que no permiten una lectura completa, ya que puede presentar manchas, roturas, dobleces, u otro tipo de problemas sufridos con el paso de los siglos”, agrega la directora.

Difusión del patrimonio

Al estar digitalizados, se evita la manipulación directa por parte de los lectores, lo que contribuye a prolongar la vida de los documentos y evita su deterioro. Los registros digitales permiten a su vez una mayor difusión de la documentación al público en general, además de los especialistas e investigadores que periódicamente acuden al archivo.

Si bien se trata de los primeros documentos manuscritos del Archivo Histórico que serán digitalizados, cabe recordar que tres colecciones fotográficas resultaron beneficiadas, en 2011, para lograr el mismo proceso, gracias al concurso organizado por el Centro de Estudios Históricos Parque de España (CEHIPE) de la ciudad de Rosario, con el auspicio de la Fundación Bunge y Born, de la Agencia Española de Cooperación Internacional y Desarrollo (AECID) y del Programa para Bibliotecas y Archivos Latinoamericanos (PLALA) con sede en la Universidad de Harvard.

En consecuencia, más de 2200 fotografías de los siglos XIX y XX están siendo digitalizadas en este momento, y se espera contar con los resultados en muy poco tiempo.

“Con este logro el Archivo Histórico inició la concreción de uno de los principales objetivos de un proyecto institucional de modernización, y la firma del presente acuerdo con Family Search pretende ser la continuidad del mismo. De esta manera, se prevé la digitalización de los principales fondos documentales en el mediano plazo”, opina Gabriela Parra Garzón.

Colecciones disponibles

Una parte sustancial del archivo fotográfico está a disposición de los interesados, mientras continúa el proceso de digitalización de más imágenes. Las series que pueden ser consultadas, son la colección familiar Roca-Allende, la colección familiar del exgobernador de Córdoba Raúl Lucini, la compilación Coronel Olmedo, y la recopilación del Padre Grenón.

A partir de estos procesos de digitalización, las fotografías pueden ser consultadas por investigadores de la historia social y particular, ya que aportan documentos de alto valor histórico. Las imágenes están conservadas en rigurosas condiciones de humedad y temperatura para protegerlas de la acción de la degradación del material orgánico, que compone las piezas.

Para llegar a poner en servicio estas imágenes, primeramente, se confeccionaron los índices de las fotografías, es decir, el instrumento que sirve para describir cada una de las imágenes. Mientras tanto, continúa la paciente y metódica labor de registro digital de las más de un millón de piezas fotográficas que componen la llamada colección de Prensa de Gobierno -período 1949 a 1990-. Estas últimas se encuentran en soportes de vidrio, 35 mm y formato medio.

La colección Roca-Allende es un archivo familiar, de carácter costumbrista; la colección Lucini consiste en un reservorio también de perfil familiar, que aporta otra faceta al fondo que ya existe en Prensa de Gobierno alrededor de la figura del gobernante, mientras que la colección Padre Grenón contiene tomas directas y reproducciones de lugares de Córdoba y piezas históricas; el notable historiador Pedro Grenón, sacerdote jesuita, utilizó algunas de estas imágenes para ilustrar sus investigaciones históricas. Grenón era un asiduo consultante del Archivo Histórico de la Provincia de Córdoba, recuerdan los empleados de la institución. La colección Coronel Olmedo contiene fotografías del militar que luchó en la Guerra de la Triple Alianza, además, cartas con su mujer y páginas de su diario de campaña.