El ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentos, a través de la subsecretaría de Fiscalización y Control, llevó adelante el viernes último un procedimiento en un establecimiento ubicado en la zona rural del departamento Río Primero. En el lugar se realizaban trabajos de faena clandestina con animales bovinos y porcinos.
Las actividades se hacían sin ningún tipo de habilitación y sin las medidas correspondientes que establece la normativa vigente que regula la actividad. El establecimiento no contaba con cerramientos, tenía piso de tierra y de techo utilizaba un cobertor plástico que no cubría la totalidad de superficie de faena.
Se encontraron en el lugar medias reses que carecían de medidas de higiene y salubridad, además de distintos cortes de carne y animales en pie encerrados en un lugar de deplorables condiciones. El propietario no sólo realizaba faena propia, sino también a terceros que comercializaban la carne con chacinadores de la zona.
Los inspectores decomisaron toda la carne y cortes encontrados, además de las herramientas utilizadas para el desarrollo de la faena: cuchillos, hachas, balanzas, aparejos y sierras. Finalmente, quedaron interdictados 55 porcinos.
En la ciudad de Córdoba. Por otra parte, en esta ciudad se controló un depósito de productos cárnicos de origen porcino, y se constató que no poseía las habilitaciones municipal y provincial. Si bien el origen de la carne contaba con procedencia de frigorífico habilitado, las condiciones edilicias y sanitarias no eran las adecuadas.
Por esto, se decomisaron 51 kilos de chacinados y se iniciaron las actuaciones correspondientes para determinar las responsabilidades y sanciones pertinentes.